El Ejército francés toma como referencia la unidad leonesa

Hace solo unos meses, los componentes del Grosa IV/1 recibían a integrantes del 61º Regimiento de Artillería (61e RA) francés (dependiente de la Brigada de Información de Montigny) que querían conocer el funcionamiento de los aviones no tripulados Searcher de cara a la próxima renovación de su flota de drones.

Los franceses quieren desestimar el sistema de lanzamiento por catapulta que emplean actualmente y sumarse a la metodología de los empleados por el Ejército de Tierra español, con una pista de aterrizaje y despegue. En León, los integrantes del ejército francés tomaron nota de la experiencia de los procedimientos técnicos seguidos por la unidad especializada del Grosa, con base en Ferral del Bernesga.

El Ejército francás prevé sustituir a partir de 2018 los actuales Sperwer por 14 aviones no tripulados Patroller.

Manejar estos sistemas –el Pasi en el Ejército español– requiere una alta cualificación que los militares del Ferral han adquirido a base de largos periodos de capacitación que pasan por 18 semanas de formación teórica, un aprendizaje práctico y una formación específica de tres meses en Colmenar Viejo (Madrid).

Poner a volar estas aeronaves en territorio nacional no ha sido cuestión sencilla, pues el proceso de certificación ha sido laborioso y complejo.

Fue el 1 de octubre de 2015 cuando nace oficialmente el Grupo de Obtención por Sistemas Aéreos IV/1 (Grosa IV/1). Su primera campaña de vuelo sobre territorio nacional (denominada Alcotan 1) tenía lugar en el último trimestre del pasado año en el aeródromo de Rozas (Lugo), antes de su traslado provisional al aeródromo de Pajares.