Así se lo han trasladado ya los responsables municipales a algunos de los 60 comerciantes que lo integran. El primer paso en esta renovación pasará por unificar la imagen de los distintos expositores. El objetivo es que un patrocinador se haga cargo de la adquisición de las nuevas estructuras, que luego se cederían a los propios comerciantes. Ellos serán los encargados de montarlo, desmontarlo y conservarlo.
Ello permitirá que la cuadrilla que actualmente se ocupa de montar y desmontar los toldos bajo los que los comerciantes colocan ahora sus cajas puedan desarrollar otras tareas.
Además de unificar la imagen de todos los puestos, se quiere poner coto a los problemas de limpieza que el desarrollo del mercado suele generar. A este respecto, la idea trasladada desde el equipo de gobierno a los comerciantes prevé que los nuevos puestos tengan incorporado un cubo de basura. Cuando finalice el mercado (se celebra los miércoles y sábados de 9 a 14 horas), los comerciantes tendrán que trasladar los residuos a un lugar que aún está por definir (no se descarta que sea el punto limpio de Puente Castro, según las primeras conversaciones) pero que sería de fácil acceso con las furgonetas.A la derecha de estas líneas puede observarse una imagen del estado en el que suele quedar la Plaza Mayor tras la celebración del mercado. El plan para potenciarlo llevará al equipo de gobierno a aplicar a rajatabla las sanciones que contempla la Ordenanza Municipal de Limpieza y Residuos. En este sentido, se considera como infracción leve que los comerciantes no recojan los residuos derivados de su actividad. Para este tipo de cuestiones se establecen multas de entre 50 y 750 euros.
Es preciso señalar finalmente que el mercado de la Plaza Mayor está integrado por una amplia oferta de frutas, verduras, hortalizas y legumbres. También dispone de puestos de venta de embutidos, quesos y bacalao.