Fuentes de la Consejería de Economía y Empleo destacaron el esfuerzo que viene realizando en las políticas de apoyo a CEE, que en la actual legislatura ha alcanzado los 76,8 millones de euros. Además, desde 1995, año en que se traspasaron a la Comunidad las funciones y servicios en esta materia, se ha producido un importante aumento en el número de trabajadores con discapacidad en los Centros Especiales de Empleo, pasando de 770 a 4.303.
La Junta dispone para 2015 de un presupuesto inicial de más de 18,6 millones de euros, lo que supone un incremento del 3,9 por ciento con respecto al año anterior, gracias a la incorporación de casi cuatro millones de presupuesto autonómico que, unido a la transferencia finalista del Estado de 14.800.000 euros, va a permitir garantizar la atención del 50 por ciento del SMI en los CEE de Castilla y León y de la financiación de sus unidades de apoyo.
Por otra parte, y “gracias al momento de recuperación económica”, desde el departamento que dirige Tomás Villanueva destacaron que será posible fomentar la integración de las personas con discapacidad en la empresa ordinaria, financiando, con hasta 3.907 euros, su contratación indefinida en jornada completa, o la parte proporcional en contratos parciales.
Las mismas fuentes ensalzaron el impulso dado al nuevo modelo de trabajo para la inclusión socio laboral que constituyen los ‘Itinerarios para el empleo’ de las personas con discapacidad intelectual que, junto a otras fórmulas complementarias, “podrán facilitar una nueva salida laboral para muchos jóvenes en situación de exclusión, así como la aprobación de las directrices vinculantes para los órganos de contratación de la Administración de Castilla y León, que ha permitido en 2014 contratos a los CEE por un montante de 9,5 millones de euros”.
Un sector clave
Un estudio elaborado en coordinador con el sector sobre los Centros Especiales de Empleo de Castilla y León asegura que el retorno económico de éstos es de 1,7 euros por cada uno invertido por la Administración Pública. Además, el 78 por ciento de los CEE registran resultados positivos en el apartado financiero y un 63 por ciento tiene a más del 60 por ciento de sus empleados con discapacidad con contratación indefinida.
Sin embargo, el reto es mejorar su competitividad, por lo que se aboga por una mayor profesionalización, mejorando sus modelos de gestión y negocio y generando sinergias que redunden en la mejora de la competitividad. Asimismo, es preciso la incorporación de nuevas tecnologías, diversificar las fuentes de financiación, la integración de principios de transparencia como elemento de ventaja competitiva o avanzar hacia la convergencia salarial.
Por último, el enfoque más comercial y orientado al mercado, junto a la evolución hacia sectores de actividad con mayor valor añadido, son los aspectos más destacados para garantizar la sostenibilidad económica de los CEE.