Por grupos de edad, la mayoría de los casos se han diagnosticado en niños y adolescentes hasta los 14 años. En concreto, este grupo acumula ya 107 de los 137 casos comunicados en lo que va de temporada por 35 médicos de la red, con una población cubierta con esta estimación de 35.104 personas. Además, se han analizado 50 frotis faríngeos (raspado en la garganta para extraer una muestra y analizarla), con 16 casos detectados.
Respecto a los 137 casos acumulados, 132 se corresponden con personas no vacunadas y los cinco restantes, de vacunados. Por tramos de edad, el grupo más afectado es el de niños de cinco a 14 años, con 69 casos, seguidos por el de bebés hasta los cuatro, con 38. Después se encuentran los adultos, de 15 a 64 años, con 25 casos. Entre mayores de 65 y 74 años, se han detectado cinco, y finalmente, entre los de más de 75 años, uno.
Gripe
La gripe es una enfermedad respiratoria infecciosa aguda con una elevada capacidad de transmisión de una persona a otra. Se presenta generalmente en los meses de invierno (de noviembre a marzo) y en forma de epidemia. Los virus tienen una gran capacidad para sufrir variaciones lo que implica que cada temporada aparezcan nuevos virus gripales para los que el ser humano no tiene protección, por lo que la vacuna debe actualizarse cada año.
En cuanto a los síntomas, se caracteriza por un comienzo brusco con escalofríos y fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares y articulares generalizados, cansancio, malestar general, congestión nasal, dolor de garganta y tos seca. La mayor parte de las personas que padecen la gripe se recuperan en menos de una semana sin necesidad de tratamiento o cuidado hospitalario. Sin embargo, en ocasiones, puede complicarse y producir bronquitis o neumonía bacteriana, que pueden ser especialmente graves en personas de alto riesgo como los ancianos o los que poseen enfermedades crónicas como diabetes, afecciones cardíacas y problemas respiratorios.
Vacunación
Este año, la Consejería de Sanidad ha destinado 2,58 millones de euros a la campaña de vacunación que se cerró el 15 de diciembre. En concreto, compró 660.000 dosis de vacuna, de las que 210.000 fueron unidades vacunales de virus fraccionado, prevista para los grupos de riesgo de entre seis meses y 59 años y para la población general de entre 60 y 64 años; y 450.000 unidades de vacuna adyuvada o de inmunogeneidad reforzada, para personas mayores de 65 años.
La vacunación está indicada en personas adultas y niños mayores de seis meses que padezcan enfermedades crónicas -pulmonares, cardíacas, renales, hepáticas, oncológicas, neuromusculares graves, diabéticos, inmunodeprimidos, etc.-; personas con discapacidad y/o déficit cognitivo -síndrome de Down, demencias, etc.-; así como entre niños y adolescentes, de entre seis y 18 años, que reciban tratamientos prolongados con ácido acetilsalicílico, por la posibilidad de desarrollar el síndrome de Reye tras la gripe; personas con obesidad mórbida -índice de masa corporal superior a 40-; y mujeres embarazadas, en cualquier momento del embarazo.
También, se recomienda la vacuna a las personas que residan en instituciones cerradas: centros o instituciones geriátricos y centros de asistencia a enfermos crónicos, disminuidos psíquicos, etc.; trabajadores sanitarios; personas que puedan transmitir la gripe a pacientes de riesgo: trabajadores de centros asistenciales de mayores, trabajadores sociales de similar dedicación -atención a crónicos- y cuidadores y convivientes con personas de riesgo; servicios esenciales para la Comunidad, tales como bomberos, cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y Protección Civil; trabajadores de granjas y mataderos de aves y otros relacionados con el medio ambiente; además de personal educativo, especialmente de guarderías y de centros de Educación Infantil.
Sistema de vigilancia
La Red Centinela es un sistema de vigilancia compuesto por médicos de familia, pediatras y personal de enfermería que mediante pruebas de laboratorio confirman los casos de gripe en una muestra estadísticamente representativa de la población. Gracias a este sistema es posible disponer de información sobre las tendencias de la enfermedad en lo referido a intensidad y distribución geográfica en toda España, además de proporcionar información sobre los casos que aparecen en la población general. Asimismo, el análisis en los laboratorios de las muestras tomadas a los pacientes permite monitorizar las características del virus presente y su posible evolución.