Y es por eso que todos podemos sufrir un atropello y debemos extremar por tanto las precauciones tanto si vamos a pie como si conducimos un vehículo. Las prisas por llegar a trabajar, los despistes por atender el teléfono móvil, los problemas de visibilidad en algunos puntos de la ciudad o el mero hecho de pensar que nunca nos va a pasar nada hacen que circulemos a más velocidad de la permitida o que crucemos la calle por un lugar inadecuado, sin esperar a que el semáforo esté en verde y sin mirar a ver si viene un coche.
Y son estas conductas las que derivan en los atropellos, que han registrado un importante repunte durante el pasado año en las calles de León. El balance de la Concejalía de Seguridad y Movilidad, dirigida por Fernando Salguero, refleja concretamente un total de 145 siniestros de este tipo frente a los 120 que se habían contabilizado en 2015. Son por tanto 25 más y representan un incremento de un 20,8%.Consecuencia de esta evolución al alza de los atropellos en la capital leonesa es la mayor lesividad provocada por los mismos. El dato más grave es el de las cuatro vidas truncadas al cruzar las calles de la capital leonesa durante el pasado año. Son tres más que en 2015, cuando un peatón falleció tras ser atropellado y cuando se puso fin a dos ejercicios en los que este dato se había mantenido a cero. Crecen también los heridos graves, que pasan de 15 a 21, y los de carácter leve, que pasan de 96 a 115, siempre según la estadística municipal.Esta tendencia al alza del número de atropellos fue percibida ya durante la segunda mitad del pasado año y por eso desde el Ayuntamiento de León se reforzaron entonces las medidas de control existentes y comenzaron a estudiarse otras nuevas. A la hora de diseñarlas, es importante conocer las causas de este tipo de siniestros.En este sentido, es preciso destacar que tres de cada cuatro atropellos se deben a que el conductor no respeta el paso de peatones. Son concretamente 108 de los 145 registrados durante el pasado año. La segunda causa más común es que el viandante cruce la calle por lugares no señalizados para ello. El balance aportado a este periódico desde la Concejalía de Seguridad y Movilidad atribuye 13 atropellos a este tipo de conductas. Finalmente, las distracciones ocupan el tercer puesto del ranking al provocar un total de ocho siniestros de este tipo.Otro criterio a la hora de adoptar nuevas medidas para reducir la siniestralidad en los pasos de peatones es el número de atropellos que se registran en determinadas calles. Concretamente, Reyes Leoneses registró una decena de atropellos. Le siguieron Fernández Ladreda (9), Alcalde Miguel Castaño (5), José Aguado (5) y Mariano Andrés (5).
Plan de choque para reducir los atropellos: controles, mensajes y más luz en los pasosCon los datos de los atropellos encima de la mesa y su tendencia al alza, el Ayuntamiento de León marcó una serie de medidas a reforzar o a poner en marcha para constituir un plan de choque y reducir este tipo de siniestros.En este sentido, la solución más novedosa ha sido la instalación de iluminación cenital en los pasos de peatones que registran un mayor número de incidencias en horario nocturno, según explica el concejal de Seguridad y Movilidad, Fernando Salguero. Concretamente, se han colocado luminarias led perpendiculares a los pasos para que sean más visibles para los conductores tras una inversión de más de 55.000 euros.
Esta medida se suma a la emprendida hace algo más de un año y que se ha visto reforzada recientemente. Se trata de los controles tanto de velocidad como de los propios pasos de peatones. Su ubicación se hace pública todos los días como muestra palpable de que no se persigue recaudar más, sino fomentar la seguridad. En el caso del radar, se establecen cuatro puntos de control por las mañanas y otros tantos por las tardes. El objetivo es que los conductores reduzcan su velocidad en vías muy largas sin semáforos pero en las que hay pasos de peatones. Además, los agentes de la Policía Local supervisan cada día dos cruces en los que se registran atropellos con cierta frecuencia.
Salguero destaca además la importancia de la formación a la hora de fomentar la seguridad vial. En este sentido, se imparten charlas y actividades didácticas para las personas mayores (más de la mitad de las víctimas de atropellos en la ciudad tienen más de 60 años), pero también para los más pequeños. Hasta los alumnos de las escuelas infantiles ya se forman en esta materia a través de los colores de los semáforos, indica el concejal de Seguridad y Movilidad.
A todas estas medidas se suman los mensajes pintados en los pasos de peatones, que se han repintado y ampliado en los últimos meses con el objetivo de llamar la atención del viandante a la hora de cruzar. Además, Salguero avanza que se está trabajando en la eliminación de obstáculos que dificultan la visibilidad de peatones y conductores. Se trata de contenedores, marquesinas de las paradas de autobús, señales...
Todo ello con el objetivo último de que el año que viene por estas fechas podamos hablar de menos atropellos.