Pero si se mira con un poco más de perspectiva, dos décadas atrás –21 años concretamente porque 1997 es el único ejercicio sin estadísticas– los números producen mucho más vértigo: casi 49.000 moradores menos en la provincia de León, una cifra similar a la del total de vecinos que tiene la capital segoviana, por dibujar una idea de lo que podrían suponer todos los habitantes perdidos en esta tierra.
Analizando municipio a municipio, la conclusión es que la friolera de 83 ayuntamientos leoneses han perdido más de un tercio de la población que tenían a mediados de los años noventa, cinco de ellos a más de la mitad (Quintana y Congosto, Barjas, Crémenes, Escobar de Campos y Truchas).
Por el contrario, sólo ha habido 22 que a día de hoy tienen más población de la que tenían entonces, en el año 1996, yse concentran todos ellos alrededor de la capital leonesa (habiendo perdido ésta casi 20.000 habitantes) y en el alfoz de Ponferrada, aunque en este caso la capital berciana también está entre las que gana habitantes.
No se produce el relevo generacional situando no solo los fallecimientos como causa de ese descenso, sino también la falta de expectativas para los jóvenes Se miren por donde se miren los datos no dan tregua, la provincia se vacía, el medio rural se extingue a pasos agigantados y la despoblación se ha convertido en un problema de primer orden. Un problema que, desde UPL, vinculan a otro que preocupa y mucho a los que quedan aquí residiendo, el desemplo. Después de conocer cómo se cerraba el año leonés en materia de empleo, el partido leonesista UPL veía con cierta reticencia la supuesta "bonanza" de los3.096 puestos de trabajo creados en el último año y la reducción de la cifra de parados pues, a su juicio, "estas cifras no pueden ocultar la lamentable situación de la provincia de León, no solo por la precariedad laboral denunciada por los sindicatos y que no podemos menos que también denunciar, sino también por el descenso poblacional en la provincia de León que el año 2017, según datos estadísticos del INE, éramos 468.316 leoneses en la provincia, y en el año 2015 éramos 479.396, lo que supone en solo dos años un descenso poblacional de más de 10.000 personas que se traduce fácilmente en una situación en la que no se produce el relevo generacional situando, no solo los fallecimientos como causa de ese descenso, sino también la falta de expectativas para los jóvenes de la provincia de León que se ven obligados a emigrar a otras provincias o el extranjero para encontrar un puesto de trabajo y que, evidentemente, ya no engrosan las filas del paro de León".
