El albergue ponferradino San Nicolás de Flüe, gestionado por la parroquia de La Encina, es el elegido por la fundación en la comunidad autónoma de Castilla y León para formar parte de una red de cinco centros, en otras tantas comunidades autónomas que quieren impulsar una estrategia en apoyo a la lucha contra el cambio climático.
El proyecto cuenta con 1,7 millones de euros para desarrollar medias que favorezcan el reciclaje, la eficiencia energética o la reducción de emisiones contaminantes. En el albergue San Nicolás de Flüe se han aplicado ya 22 sencillas medidas encaminadas, sobre todo, al ahorro en el consumo de agua y energía. Un sensor crepuscular para aprovechar en los salones la luz solar, pulsores de agua en las duchas que ofrecen hasta el 40% de reducción en el consumo oelectroválvulas para mejorar la eficiencia de los calentadores de agua son algunas de las medidas ya adoptadas. Además, está proyectada la instalación en el albergue de un punto de recarga para vehículos eléctricos, pensando en que el coche eléctrico estará instaurado en muy poco tiempo, pero también en las cada vez más utilizadas bicicletas con apoyo eléctrico o vehículos para personas con dificultades de movilidad.
Pero además, el proyecto trata también de trasladar el compromiso medioambiental a los peregrinos y que éstos ejerzan de transmisores de buenas prácticas ambientales en el Camino.Para ellos se han editado unos dípticos con consejos vinculados al compromiso ambiental.
El proyecto se presentó este lunes en Ponferrada con la participación del presidente de la Fundación San Valero, César Romero.
También estuvo presente la alcaldesa Gloria Fernández Merayo, quien apuntó la apuesta del Ayuntamiento en este aspecto de sostenibilidad ambiental del Camino de Santiago con un Plan Director que incluye el desarrollo del llamado ‘Camino Verde’, para el que hay previsto plantar árboles a lo largo de todo un tramo de ocho kilómetros de Camino en el recorrido por el municipio de Ponferrada.
El proyecto se desarrollará hasta septiembre de 2016, aunque ya están tratando de aumentar un año más su vigencia con solicitudes a la Unión Europea para prorrogarlo y «enseñar en Europa un modelo de turismo de interior sostenible»,aseguró César Valero.
Albergue de referencia
Durante la presentación en sociedad del proyecto, quedaron de manifiesto algunas cifras importantes respecto a la actividad del albergue de peregrinos San Nicolás de Flüe. El pasado año superó los 29.000 usuarios. Durante el presente ejercicio se espera que más de 26.000 peregrinos pernocten en él. Una reducción que se debe, según apuntaron sus gestores, a que han surgido en la ciudad dos nuevos albergues de iniciativas privada.El albergue ha reducido plazas en los últimos años para dar cabida a instalaciones habilitadas para todo tipo de peregrinos, como baños adaptados a personas con discapacidad. Actualmente cuenta con 144 camas y está abierto durante todo el año, no sólo en temporada alta.