La falta de información que permita que los turistas no se queden solo en la visita al mirador de Orellán y la limpieza del paraje son las dos carencias que ven los hosteleros, además de la falta de aparcamientos, que estas semanas ha hecho que el Sábado Santo, por ejemplo, los visitantes se vieran obligados a caminar hasta tres kilómetros para llegar al mirador.
«Esto se puede morir de éxito», lamentan, solicitando a las administraciones que pongan sus ojos en una zona con un potencial grande para el turista, pero que se está limitando a visitas cortas. La falta de zonas de aparcamiento es una carencia que consideran fácil de solucionar y esperan que sea un tema zanjado en breve.
De hecho el alcalde de Borrenes, Eduardo Prada, ha vuelto a poner sobre la mesa en la última convocatoria de Infraestructuras Turísticas de la Junta una memoria de ampliación de aparcamientos, en la que solicita entre 40 y 60 nuevas plazas en dos zonas cercanas al parking del mirador «tienen poca obra, solo acondicionar, y solucionarían nuestros problemas, algo que no va a hacer un autobús», dice criticando el proyecto que el año pasado estableció la Junta y contra el que se opuso incluso cortando la carretera «no estamos aquí para mirar a los autobuses pasar», criticó.
De hecho considera que solo con esas nuevas plazas, además de realizar más en Médulas, se podría dar salida a los turistas en los días de más afluencia, que realmente son Semana Santa y algún puente en los meses de verano. En total cubrirían un montante de un centenar de zonas de aparcamiento «no queremos macroparkings», dice. Considera que es el primer tema a solucionar para después realizar una organización conjunta entre los tres Ayuntamientos, Carucedo, Borrenes y Puente de Domingo Flórez «debemos crear una mancomunidad para organizar todo esto turísticamente», reconoce Prada, una idea que ya ha ido mascando en los últimos años.
Eso supliría los problemas de gestión que denota la zona y que los hosteleros también ven. Y cumpliría con otras carencias como la falta de baños públicos, que crea malestar entre los propietarios de sotos de castaños, que se están utilizando como servicios. Pero la carencia más preocupante para el regidor es la falta de desbroces en la zona «y hemos tenido ya incendios», algo que considera que debe resolverse, sobre todo en las zonas visitables.
«La gente tiene que ver que esto es un Patrimonio de la Humanidad y debe tener esa cara»
«Tenemos que vender noches», dice uno de los hosteleros, que asegura que la pretensión debe ser ofrecer actividades para intentar que los turistas se queden varios días. Una treintena de empresarios turísticos se dan cita en Orellán y están satisfechos con la respuesta turística. Además apuntan que está creciendo el número de turistas peregrinos, que recorren el Camino de Invierno «exponencialmente» y eso consideran que debe ser tenido en cuenta a la hora de establecer informadores que permitan que la visita sea más sabrosa.
Prada pide un plan de inversiones para Médulas y lamenta que desde 2001 no se haya conseguido «parece que está todo sin hacer, en el mismo punto», lamenta. «La gente tiene que ver que esto es un Patrimonio de la Humanidad y debe tener esa cara» con unas conexiones «decentes» e inversiones acordes «podemos hacerlo todo, pero con infraestructuras», dice.