El proyecto para hacer de La Robla un centro de generación de energía verde está más cerca. Los trámites administrativos se están llevando a cabo con celeridad, abriendo las puertas a la generación de nuevas energías y, con ello, de empleo. La Junta de Castilla y León, a través de la Dirección General de Infraestructuras y Sostenibilidad Ambiental, hacía pública a través del boletín oficial (Bocyl) la declaración de impacto ambiental favorable del proyecto de una planta de cogeneración de energía eléctrica y vapor de proceso a partir de biomasa, denominada «Roblum», y una planta anexa de captura de CO2, en el término municipal de La Robla, promovido por Desarrollos Renovables Abies, S.L.
El proyecto, según recoge Bocyl, consiste en la construcción de una planta de cogeneración eléctrica de 50 MW eléctricos de potencia nominal y de producción de vapor 41,4 MWt, mediante biomasa vegetal de origen agrícola, así como en la construcción de una planta de captura de CO2, que se ubicará en el polígono industrial El Crispín de La Robla.
El proceso productivo consiste en generar energía eléctrica y vapor de proceso a partir de biomasa vegetal de origen agrícola. Adicionalmente, se contempla el aprovechamiento de los gases de combustión de la caldera con la instalación de una planta de captura de CO2, que será empleado para la producción de e-metanol en una instalación industrial anexa, objeto de otro proyecto. El vapor producido en la planta de combustión de biomasa se utilizará para la producción eléctrica, pero, adicionalmente, una parte de la producción de vapor podrá ser utilizado en un proceso industrial externo y en un sistema de calentamiento de distrito (district heating) para el municipio de La Robla.
La energía eléctrica generada en la planta de cogeneración será evacuada a través de una línea eléctrica soterrada de 132 kV y unos 2.160 m de longitud, que discurrirá desde una subestación a construir en la planta (SET «Biomasa Roblum») hasta la subestación «La Dehesa», objeto de otro proyecto y propiedad de Naturgy. Esta SET, a su vez conectará con la SET «La Robla 400 kV» propiedad de Red Eléctrica de España. Asimismo, se construirá una línea eléctrica soterrada de 132 kV y de unos 2.145 m de alimentación a la planta de captura de CO2, que partirá desde la SET de distribución ya existente «CT La Robla». La energía eléctrica utilizada para la planta de captura de CO2 será de origen renovable, a través de un PPA. Ambas líneas eléctricas discurrirán por un único trazado, para minimizar afecciones ambientales y simplificar a nivel técnico el trazado.
Alegaciones
Durante el periodo de información pública se presentaron un total de 12 alegaciones, por parte de la Junta Vecinal de Llanos de Alba, Asociación para la Recuperación del Bosque Autóctono (ARBA), Ecologistas en Acción de Zamora, Ecologistas en Acción de León y varios particulares. Las alegaciones, señala en boletín, versan principalmente sobre una vinculación del proyecto con un procedimiento judicial pendiente de resolución, deficiencias en la información pública, deficiencias en el proyecto técnico y estudio de impacto ambiental, la afección ambiental del proyecto por emisión de gases de efecto invernadero y tóxicos para la salud de las personas y los ecosistemas, así como la viabilidad energética y económica del proyecto.
La Junta resuelve, una vez realizado el análisis técnico del expediente, informando «favorablemente, a los solos efectos ambientales, el desarrollo del proyecto referenciado, siempre y cuando se cumplan las condiciones que se establecen en esta declaración de impacto ambiental, las medidas protectoras y correctoras del proyecto, del estudio de impacto ambiental y del programa de vigilancia y seguimiento ambiental, en tanto sean compatibles con aquellas, sin perjuicio del cumplimiento de las normas urbanísticas vigentes o de cualquier otro tipo, que pudieran impedir o condicionar su realización», se indica en el Bocyl de este miércoles.
La Robla Green
Este proyecto que ha conseguido la declaración de impacto ambiental favorable, se en enmarca en el gran proyecto ‘La Robla Green’, que es el macroproyecto integrado de generación de energías verdes más novedoso de Europa y contará con dos grandes instalaciones punteras que trabajarán sinérgicamente.
‘Roblum’ será la primera planta de generación de energía verde a partir de biomasa con huella de carbono negativa, capaz de generar energía para el consumo de cerca de 50.000 hogares. La biomasa es una fuente de energía renovable procedente de la combustión controlada de restos orgánicos de la agricultura. Estos restos suponen millones de toneladas, parte de las cuales no son aprovechadas.
‘La Robla Nueva Energía’ será, por su parte, la mayor planta de e-metanol verde de Europa. En sus instalaciones, el CO₂ extraído de la planta de generación de energía a partir de biomasa Roblum, se mezcla con el hidrógeno verde para dar lugar a un producto de nueva generación. Un producto indispensable para descarbonizar dos sectores que se encuentran con problemas para reducir las emisiones de su actividad: la industria química y el transporte.