Árboles con nombre para echar raíces en el 'Bosque del nacimiento' de Molinaseca

Molinaseca quiere premiar a los que echan raíces en el Ayuntamiento y lo hace mediante medidas de apoyo a la natalidad que ha publicado hace menos de un mes. Por cada niño nacido o adoptado en el localidad berciana, de padres que lleven al menos diez meses empadronados en el municipio, ofrece 300 euros de ayuda por familia. Pero además, como un gesto más popular, ha establecido un espacio en el monte, denominado el ‘Bosque del nacimiento’, en el que se han restaurado una serie de árboles dañados por algún incendio y en el que se deja una parte para que por cada niño nacido se plante un árbol nuevo «con una placa en la que ponga su nombre», explica el alcalde de la localidad, Alfonso Arias.

Se han plantado ya 100 ejemplares, siempre de especies autóctonas y la intención es que las ayudas y las plantaciones sean con carácter retroactivo desde enero de este año. Incluso Arias apunta a que los menores de siete años también puedan plantar su propio árbol con su nombre «es bonito pensar que lo van a plantar, cuidar y ver crecer».
«Queremos potenciar la relación de los niños con el medio ambiente» y la propia cuna «por eso le hemos llamado echar raíces en Molinaseca», explica el regidor.

La idea partió de una costumbre que Arias conoció tras la visita de los japoneses peregrinos de la Ruta de los 88 Templos de Shikoku, que pararon en Molinaseca y plantaron allí cinco cerezos «es costumbre que quien planta un cerezo vaya cada año con su familia a verlo en tiempo de floración», explica. Eso desencadenó esta nueva idea «así un niño que nace en Molinaseca tiene su árbol que lo plantó él y lo ha cuidado». La inversión de todo el proyecto ha sido escueta, con subvención de la Diputación de León para articular una senda adaptada y un mirador y con el trabajo de los operarios del Ayuntamiento. Alrededor de 10.000 euros ha supuesto la obra que «ha encajado muy bien».

Desde ese mirador, se espera que la ruta continúe y comunique con la Ruta de Las Puentes de Malpaso, algo que el regidor ya ha solicitado a la Junta de Castilla y León, para tocar varios miradores que ofrezcan distintas panorámicas de Molinaseca y que supondría una inversión global de menos de 30.000 euros.

El incentivo poblacional no viene dado por un recorte demográfico, ya que Molinaseca no ha bajado población en los últimos años «han venido matrimonios jóvenes y hay unos 30 niños en las actividades que hemos programado en estos días festivos». Molinaseca, apunta el regidor «ha ganado 43 habitantes desde hace 10 años», dice Arias y este año se ha incrementado ya en 18 vecinos, con la venta de una zona de urbanizaciones.

La concesión de licencias para otras cuatro viviendas unifamiliares y la restauración de otras casas hacen que se prevea un crecimiento más dilatado «se están activando las licencias de obra, ya hemos cubierto la partida que teníamos para ellas este año», dice Arias. Y seguirá creciendo también con el proyecto global que se plantea para esos 50.000 metros donde está el bosque del nacimiento. Allí se espera ubicar, en el próximo mandato, una residencia de ancianos, un área deportiva y una zona de aparcamientos para mantener que los vehículos no entren en el casco histórico.