El consejero de Vivienda, Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, visitó este lunes acompañado de la directora general de Vivienda de la Junta, María Pardo, el delegado territorial Eduardo Diego y la alcaldesa de San Andrés del Rabanedo, Ana María Fernández Caurel, las obras realizadas hasta la fecha en el área de regeneración y renovación urbana (ARRU) del barrio de Pinilla.
Este proyecto ha completado su segunda fase con una inversión cercana a los 2 millones de euros, de los que más de la mitad están financiados por la Junta de Castilla y León con colaboración del Gobierno de España y del propio ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo. Con ello se han conseguido rehabilitar 72 de las 938 viviendas que se encuentran en el ámbito de actuación, que comprende unos 80.000 metros cuadrados en el entorno de la Casa de Cultura de Pinilla.
Suárez-Quiñones explicó que estas actuaciones tienen el objetivo de «mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos mediante trabajos en la accesibilidad de las viviendas, su seguridad o su calificación energética», lo que repercute no solo en el medio ambiente, sino también en «beneficiar el valor de las viviendas para los vecinos».
Continuidad comprometida
Sin embargo, no está clara la continuidad del ARRU, ahora denominados por la Junta Entornos Residenciales de Rehabilitación Programada (ERRP). Según denuncia la oposición en el Ayuntamiento de San Andrés y la Asociación de Vecinos de Pinilla, el actual equipo de gobierno que lidera Fernández Caurel no ha tramitado la continuidad del proyecto para sus siguientes fases. Cabe recordar que las dos primeras fases fueron licitadas por el anterior gobierno del PSOE con Camino Fernández al frente, ejecutadas las obras por el actual de UPL en esta segunda fase que ha concluido recientemente.
Laura Fernández, portavoz de IU-Podemos en San Andrés, califica de «verdadera vergüenza que la actual alcaldesa haya permitido que el concejal de Urbanismo no haya tramitado dicha subvención» pidiendo su dimisión o cese explicando que «en la última comisión de Urbanismo, echó la culpa a un funcionario de la no tramitación» señalando Fernández que «no solo no hace su trabajo, sino que culpa a los demás».
Por su parte, Caurel señaló en la visita al ARRU que el Ayuntamiento de San Andrés «queremos seguir apostando por seguir revalorizando la zona, que los edificios que quedan por hacer se puedan seguir haciendo y los vecinos de la zona tengan mejores condiciones». Precisamente desde la asociación del barrio se señala que la no continuidad del ARRU «significará que en 10 años Pinilla sea un barrio marginal debido al deterioro de los edificios», señalando además que han sido ellos quienes han «impulsado y asesorado a los vecinos» del ARRU.