El Centro de Referencia Estatal para la Atención a Personas con Grave Discapacidad y para la Promoción de la Autonomía Personal y Atención a la Dependencia (CRE) de San Andrés del Rabanedo volverá a poner en funcionamiento sus ascensores en estos días después de varias semanas en mantenimiento. Así lo aseguran desde el propio centro, quienes informan de que se han cambiado los cables de suspensión para reiniciar la vida útil de los ascensores.
Las familias de algunos usuarios que conviven en el CRE habían manifestado su malestar ante la ausencia de medios en el centro. Begoña Sendón, una de las madres afectadas, explicaba a este periódico que “de siete ascensores solo funciona uno”, con el perjuicio que esto supone en un lugar en el que los medios que superan las barreras arquitectónicas son necesarios en el día a día. “Son graves deficiencias que siguen sufriendo usuarios y trabajadores”, contaba Sendón.
No es la primera vez que familiares y usuarios del CRE se quejan de la “disminución considerable de la calidad de los servicios” que ofrecen en San Andrés del Rabanedo. En un comunicado emitido el pasado verano, ya lamentaban que algunas actividades "con importantes efectos positivos a nivel cognitivo y funcional" habían dejado de realizarse, que el servicio de comidas podría mejorarse y ponían el foco en la atención sanitaria en el centro ante la ausencia de un médico y con un equipo de enfermería “insuficiente”.