Así es el 'nuevo' San Marcos

GALERÍA DE IMÁGENES | Paradores reabre este jueves el hostal después de casi tres años de rehabilitación que han dado más luz y un segundo claustro al edificio

Alfonso Martínez
02/12/2020
 Actualizado a 02/12/2020
frame-2paradores.jpg
frame-2paradores.jpg
Han pasado más de 55 años desde que Franco inauguró San Marcos como establecimiento hotelero después de haber sido convento, hospital e incluso una prisión con Quevedo como uno de sus más ilustres reclusos.

Y han pasado casi tres años desde que Paradores cerrase sus puertas, que este jueves vuelven a abrir después de unas obras de rehabilitación que han supuesto una inversión de casi 16 millones de euros.

Ramón Profitós y Carmen Centeno fueron los últimos huéspedes que dejaron entonces las instalaciones de San Marcos y sus ‘sucesores’ se van a encontrar un edificio con mucha más luz y en el que destaca como gran novedad la recuperación de un claustro que se había cubierto en las obras de la década de los 60 para dotar al edificio de una mayor capacidad hotelera y de servicios.

En este atrio cerrado y con luz natural se encuentra la nueva cafetería, coronada por el espectacular techo de Lucio Muñoz, que cambia de ubicación tras haber sido restaurado en el marco de un proyecto de la arquitecta Mina Bringas.

La recepción cambia de lugar y se establece en la antigua cafetería, mientras que la zona que anteriormente ocupaba el vestíbulo principal es ahora un salón de esparcimiento presidido por la histórica escalera que da acceso a las habitaciones.

San Marcos pretende convertirse también en un museo, puesto que expone en sus paredes casi medio millar de obras de arte de diferentes épocas, algunas de las cuales han venido de otros establecimientos de la red de Paradores.

Menos salones de reuniones y banquetes y más habitaciones, puesto que hay 51 frente a las 20 de antes de la rehabilitación, forman parte de un ‘nuevo’ San Marcos que combina el respeto a la parte histórica y el realce de buena parte de su patrimonio con las comodidades de un hotel de cinco estrellas y del siglo XXI que sigue esperando su segunda fase.
Lo más leído