Así serán las cámaras bercianas contra los fuegos intencionados

El consejero de Fomento, Juan Carlos Suárez-Quiñones visitó el Centro Provincial de mando de Incendios en Soria, un ejemplo del que se colocará en el Bierzo para el control de las cámaras que se situarán en la comarca. Este sistema establecido en Soria se compone de 19 cámaras térmicas y de visión con estación meteorológica y comunicación digital, que constituye un moderno sistema de detección rápida de fuego forestal por sensores térmicos y que facilita la detección inmediata de los fuegos, con la grabación de imágenes a radios de más de diez kilómetros.

Las imágenes pueden ser usadas en procedimientos judiciales. En Zamora este sistema se compone de once cámaras. Suárez- Quiñones había avanzado en su última visita a Ponferrada que, previsiblemente a lo largo de la próxima primavera se colocarán «no menos de una decena de cámaras» de alta resolución y con detección térmica en el Bierzo, con el fin de poner coto a los incendios en una zona en la que las llamas azotan con intensidad año tras año. Sobre un millón de euros costará el dispositivo, una cifra que el consejero da por bien invertida si se consigue dar caza a los pirómanos y controlar los incendios, como ha sucedido donde ya se ha puesto en marcha esta medida, en Zamora y en Soria. Suárez-Quiñones destacó en Soria que el 91 por ciento de los incendios que se producen en nuestra comunidad comienzan por algún tipo de imprudencia, pero el peor dato es que, de ese total, el 51 por ciento son fuegos intencionados.

Suárez-Quiñones arremetía en su visita al Bierzo contra los pirómanos a los que acusaba de tener actitudes criminales, no sólo contra los bosques, sino también con las personas. El consejero recalcó en Soria que en breve se iniciará la instalación de este sistema de detección en la comarca, donde se están estudiando las ubicaciones pertinentes. Entre ellas, tiene claro que habrá cámaras en el Valle de Finolledo, en Fabero y en el Monte Pajariel de Ponferrada, localizaciones en las que se repiten los focos intencionados año tras año.