La cercana apertura de la esperada variante de Pajares ha creado mucha inquietud en aquellos pueblos que temen que para ellos suponga más olvido, menos servicios e, incluso, la desaparición de los trenes que atraviesan la histórica rampa de Pajares. En localidades como Villamanín y Busdongo, en la vertiente leonesa, y todas las del trayecto asturiano hasta la salida de la variante (Pajares; Navidiello-Parana; Linares-Congostinas, Malvedo o Puente de los Fierros) temen quedar aún mucho más aisaldos de lo que ya estaban con la reducción de líneas pues las respuestas oficiales son muy vagas e incluyen expresiones peligrosas, como estudios de viabilidad económica.
"Si pones un Ave que llegue al Ezequiel a la hora de comer y regrese tras el café te garantiza más viajeros que la mayoría de las estaciones de la Variante"
Han comenzado a moverse diversas iniciativas. En León la Asociación Ferroviaria Reino de León ofreció hace un tipo una charla del experto Guillermo Bas titulada ‘De la rampa de Pajares a la Variante: mito, mentiras y realidades’; en Asturias ya funciona una asociación para la defensa de la rampa con leoneses en ella, los alcaldes han manifestadio su preocupación... pero vivimos los tiempos de las redes sociales y por ellas ha funcionado estos días hasta hacerse viral ‘una broma’ que es mucho más que eso.
Detrás del montaje del Ave detenido ante el Ezequiel de Villamanín solo late la reivindicación de que no se olvide o no se mida un servicio público en rentabilidad económica y ahí tirán del argumento de que «si ponen un Ave que salga de Madrid, llegue al Ezequiel, coman y lleve a los comensales nuevamente a Madrid... «tendría más viajeros que en la mayoría de las estaciones en las que se va a detener».
A veces las bromas, incluso virales, no lo son tanto como parecen.