El campo leonés facturó el año pasado 834 millones euros netos, 20 más que 2023, y este buen dato anima a los sindicatos a confiar en que el sector agroganadero alcanzará en la provincia una facturación de 1.000 millones de euros a corto plazo. Lo ven viable desde la organización agraria Asaja, que este martes hizo balance de un año bueno para el regadío leonés y una cosecha de secano que se salvó a pesar de los precios bajos y los costes altos, tras dos años que fueron «muy malos» para el sector.
«Esa es nuestra aspiración para los años normales y eso lo vamos a conseguir con una agricultura más productiva vinculada a la modernización de los regadíos y a que sigamos manteniendo la actividad más intensiva de la ganadería, que es la producción de leche», señaló el secretario general de Asaja en León, José Antonio Turrado.
Aunque la organización agraria mantienen su crítica a las exigencias de cultivos de la nueva PAC, desde Asaja reconocen que esta aportó 10 millones más de ayudas a los agricultores leoneses respecto a la anterior, «no porque la PACviniese con más dinero, sino porque se ha distribuido mejor». Todo ello en un año en el que los beneficios se han recuperado un 21,55% después de dos años de caída, hasta rozar los 186,3 millones de euros. En el caso de la renta empresarial agraria por profesional, se superó en 2024 los 25.000 euros anuales.
José Antonio Turrado valoró también la inversión de obra pública sin precedentes por parte de la Junta y del Estado para modernizar los regadíos, en un año «en el que se han hecho grandes esfuerzos». «Esperamos que se mantenga la tónica inversora, que ha sido espectacular este último año en la provincia de León. Es un sueño y reconocemos el esfuerzo, pero ojalá fuera más todavía para que llegue a los que aún no les ha llegado», añadió el sindicalista.
Por su parte, el presidente de Asaja en León, Arsenio García Vidal, remató que el lúpulo fue «de los pocos cultivos que mejoró rendimientos gracias al uso de los fitosanitarios de uso excepcional que se autorizaron», frente a rendimientos de cultivos como el maíz y la remolacha más bajos que en el año anterior.
«El año de la ganadería»
El 2024 fue además «el año de la ganadería, el mejor en 35 años», dijeron desde la organización agraria, gracias a la bajada del coste de los piensos. «Ningún subsector de la ganadería leonesa ha trabajado a pérdidas», señaló Turrado y la carne de vacuno y ovino han tenido precios «atractivos y estables», algo importante dado que «en el 50 por ciento de la provincia no hay alternativa al sector ganadero». Además, desde Asaja animaron a «no perder el tren de la ganadería porcina y la avicultura».
Sin embargo, Turrado auguró un mal futuro para los ganaderos de la montaña de las zonas de Omaña y Luna, afectados por el cese de la recogida de la leche por parte de la cooperativa LAR. El secretario general de Asaja fue muy crítico con el acuerdo alcanzado hace una semana entre la Junta, los sindicatos y Lácteas San Vicente –empresa que se encarga ahora de la recogida–, ya que aseguró que «hace aguas por todas partes porque otros se levantaron de la mesa de negociación antes de tiempo».
«El acuerdo significa simple y llanamente que se está vendiendo leche 10 céntimos de euros por debajo del precio de mercado de la provincia de León», dijo José Antonio Turrado, quien lamentó que «no haya quedado atado con laJunta cuándo va a aprobar una subvención que cubra esos 10 céntimos, que es lo que nosotros pedíamos». «Estos ganaderos terminarán desesperándose y dejando las vacas», añadió.
Previsiones para 2025
Para este 2025, Asaja ve incertidumbre en el sector remolachero, «que es cautivo de unas ayudas de la Junta que no nos dejan negociar el precio» y del viñedo, «ya que en Francia están arrancando cultivo, el consumo de vino está cayendo y ya este año en El Bierzo costó vender la uva, algo que podría volver a pasar». Turrado también confió en que la falta de presupuestos tanto en la Junta como en el Estado no paralice las inversiones en los regadíos.
Por último, reclamó que seguirán en la batalla por la aplicación de la ley de la cadena alimentaria, para que no se venda a pérdidas, mostró su preocupación con los acuerdos comerciales de la UniónEuropea con Ucrania, que perjudican a los productores de cereales, y rechazó que la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y sus amenazas de imponer aranceles pueda afectar directamente a los productos del campo leonés.
Respecto a las tractoradas vividas en 2024 y a la creación de plataformas ajenas a los sindicatos, Turrado defendió que «desacreditar a las organizaciones es tirar piedras contra el tejado del sector. Creemos que se ha desinflado, porque al día siguiente hay que trabajar».