CGT denuncia que Teleperformance "criminaliza" a los trabajadores que sufren problemas de salud

El sindicato CGT denuncia que el call center de Telperformance en Ponferrada «criminaliza» a los trabajadores que sufren problemas de salud.

La denuncia por parte del colectivo se produce a raíz del despido disciplinario de 17 empleados por supuestas manipulaciones de partes médicos, una decisión que se produjo, según aseguran desde el sindicato, sin tratar de aclarar con los afectados la situación y sin dar posibilidad de explicación. «Los juzgados tendrán la última palabra, pero a día de hoy 17 familias del Bierzo han perdido su fuente de ingresos», lamentan.

No es un capítulo aislado, CGT asegura que la estrategia de la compañía para combatir el absentismo laboral es «perseguir y criminalizar a los propios trabajadores», una persecución en la que el sindicato también involucra a mutua y servicios médicos.

Así, denuncian que existe un «acoso» hacia los empleados y que «cualquier baja médica es cuestionada», llegado a ejercer presiones para que se solicite el alta ante el médico de cabecera, mientras que en otros casos es la propia mutua la que otorga el alta, «teniendo el trabajador que recurrir ante el INSS para que le vuelvan a confirmar la baja», lamentan.

Desde el sindicato se achaca esta actitud al «desconocimiento» de su actividad. «El trabajo de los teleoperadores no es físico, no levantamos pesos ni tenemos que realizar esfuerzos prolongados, pero tiene una carga mental demoledora», explican, lamentando a su vez el «desinterés» por parte de Teleperformance en evitar y prevenir situaciones inadecuadas para los trajadores como las que se están dando en la actualidad tras años de «dejadez».

«No es extraño que alguien pase su jornada bajo un chorro de aire frío en verano para mantener la temperatura de toda la estancia, esto suele provocar laringitis, afonías o resfriados, también es común que el sistema se averíe y nos pasemos días con temperaturas fuera del rango legal. Las evaluaciones psicológicas de la plantilla dan datos alarmantes. La empresa tarda meses en arreglar las averías o en proponer medidas correctoras a estos problemas y su solución es represión hacia los trabajadores», sentencian.