Cierra la quesería Piedra Los Mártires con un déficit de 3,1 millones de euros

Asaja León advierte que hay doce ganaderos de la zona damnificados con cantidades en algunos casos de hasta 72.000 euros

Ical
26/07/2024
 Actualizado a 26/07/2024
La quesería Piedra Los Mártires constata un déficit patrimonial de más de 3,1 millones de euros. | MONTAÑA DE RIAÑO
La quesería Piedra Los Mártires constata un déficit patrimonial de más de 3,1 millones de euros. | MONTAÑA DE RIAÑO

La quesería Piedra Los Mártires, radicada en el municipio leonés de Boca de Huérgano, ha entrado en proceso de liquidación después de que el administrador concursal remitiera su informe al Juzgado Mercantil de León, en el que se constata un déficit patrimonial de más de 3,1 millones de euros.

La Asociación de Jóvenes Agricultores, Asaja, de León advirtió este viernes que, tras esta situación, “los damnificados ya no van a cobrar lo que se les adeuda” y entre ellos se encuentran una doce de ganaderos de la zona y de otros puntos de la provincia, con cantidades en algunos casos de hasta 72.000 euros. Los acreedores más importantes son entidades financieras y el Instituto Tecnológico Agrario, con 547.000 euros.

Asaja lamentó que “la mala gestión de una familia haya dejado deudas tan cuantiosas a clientes y a proveedores”, así como que “haya destruido una de las escasas empresas fabriles que existían en esta comarca de alta montaña”, mientras que “los dueños suelen tener a salvo su patrimonio, eluden responsabilidades penales por malos administradores y adolecen de remordimiento de conciencia porque no la tienen”.

En este sentido, la organización agraria afirmó que la empresa cometía “abusos flagrantes” con sus ganaderos proveedores que se remontan a varios años atrás, “con liquidaciones abusivas en el precio de la leche, alteración de los análisis por calidad y retrasos en los pagos”, todo ello “incumpliendo normativa en vigor como la Ley de la Cadena Alimentaria”.

Finalmente, Asaja lamentó que la Ley Concursal “no otorgue privilegio alguno para el cobro de los créditos derivados de la entrada de materia prima en la fábrica, en este caso la leche, cuando el ganadero no solo pierde su margen de beneficio, sino que pierde también su trabajo, los costes de producción y la parte proporcional de la inversión realizada”, mientras que “incluso ha tenido que tributar por unos ingresos que no ha obtenido pero que sí le han facturado”.

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