A pesar de que llevan décadas siendo una parte más del paisaje vial, las glorietas continúan generando dudas entre muchos leoneses sobre cómo entrar en sus carriles, la manera correcta de circular en su interior y qué pautas seguir a la hora de tomar sus salidas. José Ángel González, subinspector jefe de la Unidad de Tráfico de la Policía Local, explica que a día de hoy son muchos «los conductores experimentados que todavía no saben muy bien cómo circular en una glorieta».
Por su experiencia previa a la hora de prestar auxilio en accidentes de tráfico, el subinspector ha comprobado de primera mano el «lío» que tienen los conductores cuando estos se producen en una glorieta. «Yo solía coger a los implicados y les decía: ‘Ustedes van por carriles circulares, estírenlos y no hay ninguna diferencia en la manera de conducir’. Es decir, para cambiar de carril, hay que señalizar con el intermitente y ceder la prioridad a quien circula por el que se va a ocupar. Es verdad que los conductores se han acostumbrado un poco más, pero muchos siguen todavía con esa incertidumbre cuando circulan por una glorieta», valora González.
Conocidas popularmente como rotondas, término que no aparece en la legislación en materia de seguridad vial, las glorietas siguen envueltas en falsos mitos y prácticas erróneas. Tal vez la más extendida sea la de circular por el carril exterior independientemente de la salida que se vaya a tomar. «Esta práctica se ha ido haciendo cada vez más frecuente, porque el que circula por dentro es el que suele golpear al que va por el carril exterior y acaba pagando la culpa del accidente. El que va por fuera tiene preferencia y por eso ahora hay mucha gente que directamente no utiliza los carriles interiores, que acaban infrautilizados. Estos conductores se ajustan a la legalidad, pero van contra la filosofía de las glorietas, que pasa por canalizar y agilizar el tráfico. Se trata por tanto de dar una ocupación más amplia a la glorieta y facilitar la circulación de los que van a salir antes que nosotros. Sin embargo, la gente ahora tiene miedo a ir por carriles interiores y es el mayor problema que nos estamos encontrando», comenta el subinspector.
En las charlas formativas que imparte habitualmente la Policía Local de León se insiste en «aprovechar» los carriles interiores hasta que el conductor se aproxime a la salida por la que va a abandonar la glorieta. En ese momento, atendiendo al Reglamento General de Circulación, tendrá prioridad el vehículo que circula por el carril que se pretende ocupar. «Es decir, cuando salgo de la glorieta, tengo que hacerlo por el carril exterior. Si no, estaré cometiendo una infracción y ahí es además donde se produce el 99,5 por ciento de los accidentes en glorietas. Se trata de un incumplimiento del artículo 30 de la Ley de Seguridad Vial, que dice claramente que, cuando cambio de carril, sea en una glorieta o sea en una vía recta, tengo que ceder la prioridad después de señalizar y manifestar al resto de conductores mi intención de abandonar ese carril para cambiarme a otro. Primero, señalizar con los intermitentes. Y, segundo, cerciorarme de que lo puedo hacer con seguridad sin provocar ningún accidente», detalla el subinspector jefe de la Unidad de Tráfico de la Policía Local.
"Solía coger a los implicados y les decía: Ustedes van por carriles circulares, estírenlos y no hay ninguna diferencia"
Para cumplir con esta finalidad de canalización del tráfico, resulta fundamental la concienciación de los conductores. Cuando se pretende salir de la glorieta y se debe invadir primero otro carril, teniendo en consecuencia que ceder la prioridad, puede darse el caso de que este se encuentre ocupado. «¿Qué pasa entonces? Absolutamente nada. Lo que debo hacer es dar otra vuelta, que para eso está y para eso es redonda. No pasa nada por dar dos vueltas porque para eso son redondas. Un planteamiento erróneo es que nadie tiene en su cabeza dar dos vueltas para salir de una glorieta», explica el subinspector de la Policía Local de León.
De esta manera, el conductor debe ser consecuente en todo momento con los códigos de circulación. José Ángel González recuerda que, para tomar la primera salida, lo adecuado es entrar a la glorieta por el exterior. Sin embargo, si se pretende hacer un cambio de sentido o se va a utilizar una de las últimas salidas, no tiene cabida recorrer toda esta intersección circular por el carril de la derecha. Una práctica que entorpece la circulación de los demás y multiplica la probabilidad de que se sufra un siniestro. En estos casos, el subinspector recuerda que se debe cambiar de carril «de uno en uno» y respetando la prioridad. Un modo «legal y práctico» de hacer uso de la glorieta.
La idea de las 'turboglorietas'
Y si muchos leoneses se siguen liando con las glorietas, no parece que la situación fuese a mejorar con las llamadas ‘turboglorietas’. La Unión del Pueblo Leonés (UPL) lanzó este mes una petición al Ayuntamiento para instalación este tipo de intersecciones en la plaza de toros y en la zona del Auditorio. Estas ‘turboglorietas’ de tráfico encauzado pretenden simplificar las entradas y salidas de los vehículos, además de evitar que estos puedan recorrerla en su totalidad por el carril exterior.
Sin embargo, según la opinión personal de José Ángel González, se trata de una propuesta que conviene estudiar con detenimiento, puesto que, en otras ciudades, con la vecina Oviedo como ejemplo más cercano, se han retirado algunas ‘turboglorietas’ por un incremento notable de la siniestralidad. «Estarían muy bien para los leoneses, que saben por dónde entran y por dónde quieren salir, pero si voy a Bilbao y me encuentro una ‘turboglorieta’, no sabría qué hacer o para dónde ir. Si me voy guiando con el GPS que me dice que coja la segunda salida, o la tercera… es una locura», expresa finalmente el subinspector jefe de la Unidad de Tráfico.