El tejado sigue ajándose y causando desperfectos en el interior. Lo cierto es que, pese a la preocupación vecinal, ni los vecinos ni ninguna entidad pueden ni deben acometer las reparaciones necesarias, dado que el edificio es propiedad de la parroquia y, por lo tanto, está bajo la responsabilidad del Obispado de León, quien debe ser el encargado de llevar a cabo y costear las mejoras o reformas que la iglesia necesita, cada vez más urgentemente.

Hace más de tres años, en abril de 2019, esta situación se ponía en conocimiento de Obispado. Entonces, la anterior Junta Vecinal de Ciñera enviaba al obispo de la diócesis, Julián López Martín, una misiva, de la que se hizo eco en su momento La Nueva Crónica, en la que alertaban de la necesidad de intervenir en la iglesia. Argumentaban entonces que "de no tomarse medidas de manera urgente puede terminar ocasionando daños estructurales irreparables, esto sin obviar que en un futuro no muy lejano podría haber cierto riesgo físico para las personas que habitualmente se congregan en la mencionada iglesia".
Más de tres años después, el deterioro sigue avanzando en la iglesia sin que el Obispado haya puesto medios para evitarlo. "El tiempo nos ha dado la razón, pero todo ello no tuvo el efecto deseado y todo quedó en buenas palabras y promesas de estudiar la situación", lamentan los vecinos de la localidad gordonesa.