La mención de honor ‘Vellido Dolfos’, en evocación del héroe leonés que liberó el Reino de León de la invasión castellana en Zamora, recayó en el alcalde de León, José Antonio Diez, quien recibió un galardón que le “honra mucho” pero que es “inmerecido” según el mismo reconoció, ya que aseguró que su misión como alcalde de todos los leoneses es “defender León y exigir aquello que nos corresponde allí haya que hacerlo”.
“Está claro que voy a seguir en ello, porque a pesar de las dificultades y de lo difícil que es el objetivo, cada vez estamos más cerca”, afirmó Diez, al tiempo que consideró que “la concienciación que se está consiguiendo que cada vez cale más fuera de la tierra el problema de León, los agravios durante años y los problemas actuales que no son consecuencia de la casualidad, sino de unas políticas centralizadoras y devastadoras”.
Para Diez esto es importante, ya que las reivindicaciones eran hasta ahora “absolutamente fuera de la tierra”, mientras que “para que un problema se reconozca hay que darlo a conocer”, algo en lo que “se ha avanzado mucho y se seguirá haciendo” y respecto a lo que se siente “muy orgulloso de poder hacerlo”.
Respecto a las distinciones honoríficas, denominadas ‘Aconceyau de Honor’, la primera de ellas le fue otorgada al senador de Compromis, Carles Mulet, “por su labor parlamentaria en favor del País Llionés”. El valenciano, presente en el acto, se mostró “muy contento” de recibir un reconocimiento que “pone en valor el trabajo hecho en una Cámara como el Senado” y que permite “ver que al leonesismo le sirve lo que se hace”, al tiempo que supone “un balón de oxígeno para el valencianismo”.
Un valenciamismo que aseguró que tiene “inquietudes muy parecidas” con el leonesismo, de forma que ser nombrado ‘Aconceyau de Honor’ hace que “el trabajo como senador y valencianista tenga sentido”, ya que ambos reivindican “otro modelo de Estado en el que las periferias también puedan ser protagonistas”, así como hacer ver que “es posible hacer otro tipo de política en España”.
El pedagogo y escritor Rogelio Blanco recibió la distinción de ‘Cazurro de Honor’ “eneconocimiento a la resistencia y perseverancia en la lucha por el País Llionés”, mientras que el poeta vasco castellano Juan Carlos García Hoyuelos también nombrado ‘Aconceyau de Honor’ “por entender y apoyar las reclamaciones del País Llionés”.
Las distinciones honoríficas de ‘Aconceyau de Honor’ in memoriam fueron para la escritora Eva González Fernández, “por su labor literaria en pro de la llingua llionesa noroccidental”, la abogada Cundi Santos Urcera, “princesa del Curueño y luchadora incansable por el País Llionés”, y el dibujante Lolo, fallecido de forma repentina hace un mes, “por su entrega y su lucha solidaria y altruista por la tierra que le vio nacer”.
“Las velas nos empujan”
El secretario general de Unión del Pueblo Leonés, Luis Mariano Santos, que fue la primera persona en recibir el premio de Conceyu País Llionés, no quiso perderse un acto en el que se mostró “agradecido”, al considerar que “siempre es positivo que se reconozca el trabajo de cualquier leonesista, esté donde esté, y se ponga en valor a todas aquellas personas que defienden su tierra”. “A partir de ahí, cada uno juzgará lo que le dé la gana”, dijo.
Para Santos, el hecho llevar ya mucho tiempo viendo que “la gente responde muy bien al mensaje leonesista” supone un aliciente para “seguir trabajando”. “Ya nos animaba hace tiempo cuando la respuesta no era tan positiva, así que ahora todavía más, porque tenemos la corriente por detrás y las velas nos empujan”, concluyó.