La de este jueves ha sido una jornada de paro para los conductores y conductoras profesionales, que también se han concentrado frente a la estación de autobuses de León con el objetivo de que se escuche su protesta.
Benigno Salas Puente, secretario provincial de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO, señaló que seguirán en la movilización hasta conseguir los objetivos marcados, que aseguró que son que se apliquen “coeficientes reductores ya” y que se fije “una jubilación anticipada en el sector del transporte para los conductores y las conductoras, porque creemos que lo necesitan”.
Tal y como han aseguró, la huelga ha tenido un seguimiento en la provincia de prácticamente el cien por cien en conductores de autobuses urbanos y del 85 por ciento en el resto del sector. Ha transcurrido “sin incidentes” y se han respetado los servicios mínimos, pese a considerar que los fijados son “completamente abusivos”.
Desde este sindicato también han confesado no entender por qué otros han firmado con la patronal un acuerdo cuando estiman que no existen garantías. “Al final esto tiene que salir en un real decreto del que no sabemos la fecha y ese real decreto lo tienen que votar en el Congreso de los Diputados y tiene que salir por mayoría absoluta”, apuntó Luis Villares, coordinador del sector en Castilla y León.
Villares incidió también en la necesidad de actuar, porque afirmó que existe un “peligro”. “Un transporte de viajeros lleva 40-50 personas con él y una persona de avanzada edad en la carretera es un peligro tanto para él como para los demás usuarios de la vía”, dijo.
En Castilla y León el seguimiento de esta jornada de huelga ha sido del 85 por ciento y a nivel nacional de entre el 80-85 por ciento. El paro continuará este viernes y los días 5 y 9 de diciembre desde las 00:00 horas, mientras que a partir del día 23 de diciembre, en el caso de no haber alcanzado un compromiso antes, este tendrá una duración indefinida.