Continúan los malos olores en el matadero municipal de La Pola

Las denunciadas prácticas insalubres en las instalaciones del matadero de La Pola de Gordón continúan, y los vecinos afectados por los malos olores y los vertidos han vuelto a poner la situación en conocimiento de las autoridades. Este mismo fin de semana, se cursaba una nueva denuncia y agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil(Seprona) se acercaban al lugar de los hechos. Desde el sábado a mediodía, y durante todo el fin de semana, varios bidones de gran capacidad con tripas y pieles de los animales sacrificados eran la fuente del problema, y es que fueron depositados en el exterior de las instalaciones a la intemperie. La llegada del buen tiempo y el calor agravaron la situación, provocando un hedor que es perceptible en todo el polígono industrial y en puntos de la localidad de Beberino, donde varias casas se ubican a menos de 40 metros del matadero.

La llegada del buen tiempo agrava el problema y en el último mes se han cursado tres denuncias Para los afectados por este problema, la situación que se repite desde hace catorce años es ya del todo insostenible. Las tripas y las pieles depositadas en el exterior del matadero, sumado a la sangre que se vierte en el río Bernesga, son un foco infeccioso, atrayendo además a insectos y animales. Lasituación nosolo afecta a los residentes más cercanos, también a los negocios ubicados en el polígono industrial y a los turistas. Cabe destacar que las instalaciones del matadero se ubican en una zona muy frecuentada por peregrinos que realizan la Ruta de San Salvador, así como de amantes del senderismo que realizan rutas por la zona, declarada Reserva de la Biosfera.

A lo largo de los últimos catorce años, se han presentado más de cien denuncias sobre estas prácticas, y en el último mes se han registrado tres. Así, el pasado 14 de mayo La Nueva Crónica se hacía eco de la denuncia de la formación política Ciudadanos que alertaba de la existencia de vertidos de origen animal que llegaban a las aguas del Bernesga procedentes del matadero municipal, concretamente sangre, tripas e incluso orejas de cerdo que iban a parar al cauce fluvial. El pasado 4 de junio eran vecinos particulares quienes ponían en conocimiento de las autoridades la situación, presentando una denuncia ante el Seprona para su posterior traslado y trámite a la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León.

En ella se manifestaba la existencia de pieles de cordero depositadas en el suelo y tripas en contenedores abiertos, recordando que estas prácticas suponen un perjuicio para la salud y el medio ambiente. El pasado fin de semana la situación se repetía, y durante la jornada de ayer martes los desperdicios y malos olores volvían a darse en los exteriores del matadero. Los afectados esperan que las autoridades competentes pongan en marcha las medidas necesarias, ya que durante los últimos catorce años ni el Ayuntamiento ni el arrendatario del matadero han hecho nada para subsanar la grave situación.