Correos da 'calabazas' a Morán en la implantación de cajeros rurales

La Diputación celebró este miércoles un pleno en el que el presidente de la institución provincial, Eduardo Morán, informó que no ha podido salir adelante el acuerdo con Correos para la instalación de cajeros automáticos en el medio rural. Al contrario de lo que ha ocurrido en otras instituciones provinciales, en León se ha fracasado en esta línea de acción frente a la exclusión financiera de los pueblos.

Preguntado por la portavoz de Ciudadanos, Gemma Villarroel, sobre las propuestas que periódicamente lanza para combatir el cierre de sucursales bancarias en el León rural, Morán señaló que sí se han sacado adelante otras partes del convenio con Correos como la del cobro de recibos o el hecho de que los carteros puedan llevar dinero en metálico tras suscribir la entidad un acuerdo con toda la patronal bancaria. "Lo que vienen haciendo todas las diputaciones provinciales en España con Correos para instalar cajeros en el medio rural en esta casa no ha sido posible, pese a que nosotros hemos sido la primera o la segunda en empezar a trabajar con ellos. Correos no es una empresa pública y no pudimos cumplimentar ese acuerdo que teníamos", expresó en la sesión plenaria el presidente de la Diputación.

Ante estas 'calabazas' de Correos, pese a que se llegaron a ofrece cifras sobre el número de cajeros que se podrían instalar, Morán matiza ahora que esta medida "únicamente no es la solución" ya que la población de edad avanzada, mayoritaria en los pueblos, tiene "dificultades" para operar con ellos. No obstante, desde la Diputación de León aseguran que "mantendrán abierta esta posibilidad", pese al hecho de "no haber encontrado la misma solución que otras instituciones provinciales porque la ley en León es distinta".

Desde el equipo de gobierno en el Palacio de los Guzmanes señalan que, paralelamente, continuarán trabajando en ejes de actuación como las oficinas ambulantes con personal y la adecuación de locales como oficinas junto a los ayuntamientos, llegando a sufragar el 70 por ciento de los costes: unos 5.000 euros anuales por oficina. En su pregunta, Villarroel también señaló otras posibilidades como que los estancos pudieran hacerse cargo de la prestación de algunos servicios financieros.