Este proyecto, que comenzó el 1 de octubre de 2018 y finalizó el 30 de junio de 2019, buscó promover iniciativas de custodia del territorio (CdT) que tuvieran como objetivo la conservación del hábitat natural, la concienciación de la población y el desarrollo de actividades sostenibles. Se desarrollaron un conjunto de actuaciones para implicar a propietarios y otros agentes públicos y privados, usuarios del territorio, en la conservación y uso de los valores y los recursos naturales, culturales y paisajísticos, promoviendo acuerdos de custodia y mecanismos de colaboración conjunta, además de poder hacer extensible ese trabajo a otras áreas de la Cordillera Cantábrica similares. Entre otras actuaciones, hubo una campaña ‘CdT y educación ambiental en la escuela’ basada en el fomento de la curiosidad como fuente de conocimiento, interesando y motivando a los escolares en la temática de la CdT, así como jornadas sectoriales, en las que se pudo analizar la actualidad y el futuro de la CdT por parte de administraciones públicas, sectores económicos y sociales. Además, se editó un manual en el que se recogen 25 buenas prácticas que pueden servir de referencia a todas las personas o entidades interesadas.
El objetivo principal era la promoción de iniciativas de custodia del territorio para la conservación del hábitat natural, la concienciación de la población y el desarrollo de actividades sostenibles El objetivo principal era la promoción de iniciativas de custodia del territorio para la conservación del hábitat natural, la concienciación de la población y el desarrollo de actividades sostenibles. Minimización de impactos ambientales (pérdida de biodiversidad, incendios, cambio climático, etc.). Aumento de la calidad ambiental. Concienciación de la población en materia de custodia del territorio. Aumento del voluntariado y de la participación para la custodia del territorio. Implicación de todos los sectores económicos en la conservación de la Reserva, así como la difusión de las buenas prácticas en materia de custodia del territorio, e intercambio de experiencias en materia de custodia del territorio con otros espacios.
Premiados también en 2010
Ésta no es la primera vez que la trayectoria del Alto Bernesga es reconocida con uno de los premios Conama. Ya en 2020, esta reserva de la biosfera recibió el segundo accésit en la categoría de menos de 5.000 habitantes por su proyecto ‘Programa conjunto de lucha contra la despoblación a través de la inserción socio-laboral de las mujeres rurales en la Reserva de la Biosfera de Alto Bernesga’. El objetivo principal se centraba en la a recuperación demográfica y socioeconómica de la Reserva de la Biosfera de Alto Bernesga, teniendo en cuenta los criterios de sostenibilidad ambiental, social y económica, que marcan las políticas de desarrollo sostenible a nivel mundial, europeo y nacional. Estaba dirigido, principalmente, a mujeres de la Reserva de la Biosfera Alto Bernesga que comprende los municipios montañeses de La Pola de Gordón y Villamanín.