La investigación se inició en junio tras ser desmantelada una plantación de marihuana ‘indoor’ compuesta de 410 de plantas de marihuana, así como todo el material necesario para su producción y cuidado en la localidad berciana de San Miguel de las Dueñas (municipio de Congosto).
Fruto de las indagaciones, se pudo identificar a varias personas que participaban en dicha plantación y la existencia de otras, por lo que se abrió una operación para detectar a los cabecillas de la organización y desmantelar las plantaciones. Gracias a la investigación llevada a cabo, se conoció la existencia de un complejo entramado criminal dedicado al cultivo y tráfico de marihuana en viviendas, que competía por el mercado con otra organización que ya fue desmantelada por la Guardia Civil en el mes de septiembre.
La disputa por el mercado entre ambas alcanzó su punto álgido cuando varios de los integrantes de la organización investigada procedieron a sustraer numerosas plantas de marihuana de la plantación exterior situada a orillas del río Duerna, que controlaba la organización rival. Los dueños de la misma detectaron a uno de los asaltantes y le capturaron y torturaron para que identificase a las personas que le acompañaron durante el robo.
Dinero, joyas y armas
Este fue uno de los motivos que llevó a una primera fase de la operación, que se saldó con la detención de 14 personas (cuatro ingresaron en prisión preventiva), siete entradas y registros (para los cuales fue preciso el apoyo de las unidades de intervención, la Agrupación Rural de Seguridad y la Unidad de Seguridad Ciudadana de Comandancia (Usesic), y se desmantelaron cinco plantaciones ‘indoor’ con 1.127 plantas de marihuana y se incautaron 930 euros en efectivo, diversas joyas de oro, 150 transformadores y sus respectivas lámparas halógenas, un arma corta simulada, una carabina del calibre 22, 59 cartuchos del mismo calibre, una envasadora al vacío y muchos efectos de interés para la investigación. Asimismo, fueron desmantelados cinco enganches ilegales al tendido eléctrico como consecuencia de los respectivos delitos de defraudación de fluido eléctrico.
Tras el testimonio de la persona que fue retenida y una vez efectuado el examen forense —la víctima presentaba cuantiosas y graves lesiones— se procedió a la explotación de una segunda fase de la operación en la que se detuvo a ocho personas (seis ingresaron en prisión preventiva), se practicaron cinco entradas y registros (nuevamente necesario el apoyo de las unidades de intervención, la Agrupación Rural de Seguridad y la Usesic León) y se desmanteló otra plantación ‘indoor’ con 178 plantas de marihuana. Se incautaron además siete armas de fuego (cuatro escopetas, dos carabinas y una pistola), un arma tipo ‘táser’, 115 gramos de marihuana seca, 31 transformadores y 31 lámparas halógenas, entre otros efectos. Además, fueron desmantelados otros dos enganches ilegales al tendido eléctrico.
La operación fue desarrollada conjuntamente por el Equipo de Policía Judicial de Ponferrada y el Área de Investigación de Bembibre y dirigida por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Ponferrada.
Esta operación, junto con la también recientemente explotada Bacenturón, han supuesto un contundente golpe contra el tráfico de marihuana en la provincia de León y limítrofes, habiéndose retirado del mercado más de 2.800 plantas de marihuana y detenido a un total de 31 personas, todas integrantes de dos organizaciones criminales dedicadas al tráfico de marihuana y competidoras entre sí.
El delegado del Gobierno en Castilla y León quiso agradecer públicamente a los guardias civiles participantes en esta operación la “eficacia” demostrada, “combinada con las medidas de seguridad en el actual estado de alarma”.