La Dirección General de Tráfico tiene previsto reducir la tasa límite de alcohol al volante. Esta iniciativa puesta en marcha por el organismo que dirige Pere Navarro tiene como objetivo a un tipo concreto de conductores, los profesionales.
Así, para ellos la nueva tasa máxima será de 0,10 mg/l de alcohol por litro de aire aspirado. Hasta el momento se igualaba con la del resto de conductores, es decir, se situaba en 0,25 mg/l. Las sanciones por superar este límite dependen de la tasa registrada, pero pasa por la pérdida de puntos y una multa de entre 500 y 1.000 euros.
El objetivo, según explican, es reducir la siniestralidad en las carreteras especialmente por parte de aquellos que realizan su trabajo en las mismas. La fecha de entrada en vigor está por confirmar mientras ciertos sectores muestran su descontento con la propuesta al considerar que para los profesionales la tasa límite debe ser 0.
75 de los 1.145 fallecidos en las carreteras el pasado año 2023 viajaban en un vehículo conducido por un profesional.