Que el Carnaval de La Bañeza ostente el reconocimiento merecido de Fiesta de Interés Turístico Nacional ha vuelto a quedar de nuevo más que demostrado. Los bañezanos y bañezanas no han bajado el listón y han dejado patente que por sus venas corre sangre carnavalera como en ningún otro sitio de la provincia leonesa y como en pocos lugares más de España, después de dejarlo bien claro el pasado Sábado de Chispas.
La Bañeza celebró este martes su Gran Desfile de Carnaval con la participación de más de 3.000 personas que llenaron de colorido cada rincón de la ciudad con sus mejores disfraces preparados para la ocasión, además de con ingentes cantidades de confeti. Originalidad, imaginación e ingenio son los grandes protagonistas de cada uno de los trajes que lucieron los participantes del desfile y que en muchos casos los grupos carnavaleros confeccionan con mucha ilusión y mimo de un año para otro.
Un desfile donde quedó patente que Don Carnal sigue siendo el rey de La Bañeza que contó con más de 50 grupos de la ciudad, así como de muchos pueblos aledaños de las tierras bañezanas disfrutando del día grande de lucir las mejores galas preparadas.
Pero si alguien lució su mejor gala como nadie, además de una radiante ilusión y envidiable sonrisa, esa fue la Musa del Carnaval 2025, Estela Santos Román, que junto a los integrantes de su grupo Légolas, encabezó el desfile durante todo el recorrido sin dejar de bailar y disfrutar de cada instante siendo consciente de que era el momento que seguramente, como tantas bañezanas, han deseado vivir desde niñas.
Tras el grupo de la Musa, ante la atenta mirada de miles de personas, los más de 3.000 participantes fueron exprimiendo cada momento del extenso recorrido del desfile con mucha diversión y baile al son de las más de 20 charangas o de la música de las carrozas.
Sirenas, abejas, aztecas, bellas durmientes, alpacas, monstruos, elfos, hadas, mariposas, caballitos de mar o payasos, entre otros muchos, fueron algunos de los trajes por los que optaron los grupos en esta ocasión, aunque tampoco faltó la típica originalidad bañezana que hace de su Carnaval algo diferente, haciendo un guiño a la tradición de la ciudad como las jornadas de las ancas de rana, llaveros promocionando los comercios locales o el Gran Premio de Velocidad en formato de minimoto, entre otros. Igualmente, como es habitual, no faltó la espontaneidad de forma individual de bañezanos que siempre logran sacar las carcajadas de todos los que presencian en el desfile.
Una forma de vivir el Carnaval de una manera única que solo se puede entender su ‘locura’ si eres de La Bañeza. Cuatro días de Carnaval de pura juerga y desenfreno que año tras año se quedan cortos para los bañezanos pero que, muy a su pesar, hoy tendrán que despedir a Don Carnal y darán la bienvenida a Doña Cuaresma con el tradicional Entierro de la Sardina entre coplas y escabeche a partir de las 20:30 horas en la plaza Mayor.