Ecologistas en Acción denuncia que el Ayuntamiento de León tiene un Protocolo de Actuación limitado ante episodios de mala calidad del aire. Según la organización, el Consistorio aprobó este 2019 una intevención ante dos únicos contaminantes, general partículas respirables y dióxido de nitrógeno, que "no cumple la normativa ni en los umbrales para la aplicación de las distintas medidas ni en el aclance de las mismas", destaca Ecologistas. Unas medidas que "deberían incorporar restricciones inmediatas y amplias de la circulación de automóviles u otras fuentes puntuales responsables de los episodios".
Ecologistas en Acción destaca que sólo el Ayuntamiento de Valladolid se ha dotado de un protocolo de actuación frente a episodios de mala calidad del aire adaptado a norma, pese a que desde 2007 la Ley estatal de calidad del aire y protección de la atmósfera obliga a su adopción en las comunidades autónomas y los municipios con más de 100.000 habitantes. Critica, asimiso, que la Junta de Castilla y León y los ayuntamientos de Burgos y Salamanca carecen de protocolos frente a episodios de contaminación, "por lo que acumulan ya año y medio de retraso sobre el plazo legal para aprobarlos". En el caso del Ayuntamiento de Burgos, se llegó a iniciar un protocolo en 2022, "bastante mejorable, que nunca llegó a ser aprobado, ni por la anterior Corporación ni por la nueva", puntualizan.
Dado que la mayor parte de la contaminación en las áreas urbanas procede del tráfico, y mayoritariamente de los coches, en opinión de Ecologistas en Acción buena parte de las medidas para reducir las puntas de contaminación "deben ir encaminadas a limitar la utilización del automóvil con antelación suficiente, mediante acciones que a la vez que reducen la velocidad y el uso del coche, canalicen la necesidad de movilidad hacia el transporte público y los modos de transporte no motorizados, como la bicicleta y el peatón".
"La supuesta impopularidad de las medidas de restricción del tráfico está demorando o impidiendo la ejecución de estas medidas y otras como las zonas de bajas emisiones obligadas antes de 2023", señalan desde la organización, y que "la mayor parte de los ayuntamientos siguen sin implantar, por las incomodidades o las protestas de ciertos sectores, amplificadas políticamente en vísperas de convocatorias electorales, cuando lo cierto es que son medidas entendidas y compartidas por la mayoría de la población, al fundamentarse en la salud pública".
Ecologistas en Acción considera que esta realidad ha quedado "acreditada" por la respuesta ciudadana ante la crisis de la Covid-19, asumiendo "con naturalidad limitaciones de la circulación mucho más drásticas que las que se requieren en los episodios de contaminación atmosférica, que en general sólo afectan a un medio concreto como es el automóvil privado con motor de explosión".
La información a la población sobre la gravedad del problema es otro requisito imprescindible para que los protocolos frente a los episodios de contaminación del aire sean eficaces, consideran los ecologistas. Sin embargo, "a día de hoy la mayoría de las administraciones siguen sin informar adecuadamente de los episodios de mala calidad del aire, difundiendo a lo sumo, cuando estos se producen, mensajes rutinarios a través de sus páginas web o listas de móvil", finalizan.
Por todo ello, en el Día Internacional del Aire Limpio por un Cielo Azul Ecologistas en Acción reclama a la Junta de Castilla y León y a los ayuntamientos de Burgos, León y Salamanca que cumplan con su obligación legal de aprobar y aplicar protocolos de actuación frente a episodios de mala calidad del aire. La organización ambiental también pide al Gobierno de España que exija a estas administraciones el cumplimiento de la ley, para proteger la salud.