Concretamente, el 2020 se cerró con los peores datos de la serie histórica –que recoge los últimos 15 años– en cuanto a número de viajeros. En este sentido, el número de usuarios se situó únicamente en 18.600 lo que supone una caída del 71,8% en comparación con los 65.982 contabilizados en 2019. Además, la estadística facilitada por Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) supone que las instalaciones ubicadas en La Virgen del Camino dejan atrás un periodo de tres años de crecimiento en cuanto a su número de pasajeros.
Y una tendencia a la baja puede observarse al analizar los datos referidos a las operaciones que se llevan a cabo en el aeropuerto de León, es decir, a los aterrizajes y despegues que los aviones llevan a cabo en sus instalaciones. Concretamente, la cifra total durante el pasado ejercicio se situó en 1.890, lo que representa un descenso del 31,5% en comparación con las 2.755 operaciones de 2019. También se rompen de esta manera tres años de tendencia al alza en cuanto al número de aterrizajes y despegues desde el aeropuerto de León.
Su trayectoria está íntimamente ligada a la evolución de la situación económica general. Para encontrar sus mejores resultados hay que echar la vista atrás hasta los años 2006 y 2007, antes de que se desatase la anterior crisis económica, la de 2008. Hasta ese momento se había superado la cifra de 160.000 viajeros (2007), pero a partir de ahí comenzaron siete años de tendencia a la baja que coincidieron con las diferentes fases de la recesión.
A partir de 2015 la estadística comenzó a mejorar de la mano de la recuperación económica, pero ahora la última crisis, la del coronavirus, ha dado al traste con esa tendencia al alza en cuanto a la utilización de las instalaciones.
En todo caso, el Consorcio para la Gestión de la Promoción del Aeropuerto de León trabaja para conseguir que los datos mejoren después de que la pandemia sea historia y contará durante este año con un presupuesto de 1,4 millones de euros para redactar unas nuevas bases para la concesión de subvenciones en régimen de concurrencia competitiva destinadas a apoyar el desarrollo de una oferta de productos que fomente la actividad de las instalaciones ubicadas en La Virgen del Camino a través de destinos nacionales e internacionales.
Cabe recordar que el aeropuerto de León recuperaba la actividad tras la paralización derivada del estado de alarma por la crisis sanitaria del coronavirus después de que el consorcio y la aerolínea Air Nostrum acordaran redistribuir los vuelos que no se habían llevado a cabo por la suspensión del contrato. Concretamente, se repartieron entre los meses de verano, puentes y fiestas navideñas, además de mantener dos conexiones semanales con Barcelona hasta el próximo mes de febrero.
En la comunidad
Los cuatro aeropuertos de Castilla y León registraron un 66,87% menos de viajeros en 2020 que un año antes, puesto que fueron utilizados por 116.163, frente a los 350.659 de 2019. Por tanto, los aeródromos de la Comunidad contabilizaron 234.496 usuarios menos en un ejercicio marcado por el COVID-19 y las restricciones a la movilidad.De esta forma, el aeropuerto de Valladolid cerró el pasado ejercicio con una caída del tráfico de viajeros del 71,24% al contabilizaron 71.685, es decir 177.539 menos que un año antes. También anotó un descenso del 86,77% la base de Salamanca hasta los 2.350 usuarios.
Por el contrario, el aeropuerto de Burgos sorprendió con una subida del tráfico de viajeros del 33,02%, hasta los 23.528, es decir, logró elevar el registro de 2019 en 5.841 pasajeros. Además, sus operaciones crecieron un 251,38%, hasta las 11.318.