¿Quién dijo que los minusválidos no pueden hacer el Camino de Santiago? Nada más lejos de la realidad, ni siquiera en los casos más extremos de inmovilidad. Así lo está demostrando la asociación francesa Compostelle 2000, con ocho etapas que están recorriendo estos días por buena parte del territorio leonés. Un total de 47 personas, algunas de ellas de París, donde tiene su sede central la mencionada asociación, y otras del resto del país francés, especialmente de Bretaña. Las personas discapacitadas son llevadas en sillas adaptadas, trasladadas por dos voluntarios y a buena velocidad. La ilusión de unos y otros es máxima, disfrutando un Camino de Santiago de fe y solidaridad. La Nueva Crónica se ha encontrado con ellos en Burgo Ranero.
Asociaciones jacobeas de León colaboran con el colectivo francés en la organización de esta actividad que realizan ya por tercera vez. Entre los participantes, algunos que repiten y otros que debutan. Es el caso de Emanuelle, siempre sonriente, y encantada de poder hacer el Camino de Santiago con sus compañeros.
Una buena noche reparadora ayudará a recuperar fuerzas y proseguir con el Camino. Les quedan otras seis etapas. Este viernes, salida de Burgo Ranero y llegada a Mansilla. No hay cansancio que valga.
El Camino de Santiago, sin barreras
La asociación francesa Compostelle 2000 pregrina por León con personas discapacitadas
09/07/2015
Actualizado a
18/09/2019
Lo más leído