El leonesismo ya trabaja en la próxima gran manifestación

El 18 de marzo de 1978, bajo el lema ‘León sin Castilla. Por la autonomía y el referéndum de la Región Leonesa’ la capital vivió una concurrida manifestación. Coincidiendo con el 43 aniversario de esa movilización, diversos colectivos anunciaron ayer una próxima convocatoria pro-autonomía cuando las circunstancias lo permitan.

La iniciativa cuenta hasta el momento con el apoyo de 14 colectivos regionalistas y sus promotores hacen un llamamiento a que se sumen todo tipo de colectivos y entidades para lograr una gran respuesta. «Aquí todo el mundo se tiene que mojar. Apelamos a todo tipo de organizaciones. Esto va de lanzar un SOS al mundo, porque lo que estamos pasando no tiene nombre», señaló el presidente de Conceyu País Llionés, Carlos González, quien participó en la manifestación de 1978 cuando tenía 14 años.

Como portavoz de Xuntanza Llionesista, Ismael González, remarcó que el objetivo de la iniciativa será exclusivamente reclamar la autonomía para la Región Leonesa. «Estamos en una situación colonial regidos por una administración ajena y queremos convertir las calles de León en una gran marea púrpura que sirva de plebiscito», añadió.

En representación de la Plataforma pro-identidad leonesa, Lluis Nel, comentó que se comienza ya a trabajar en la organización «para que al día siguiente de que se dé por finalizada la crisis sanitaria esté todo preparado para salir a la calle y que sea una especie de fiesta porque acabó la pandemia y empieza la lucha por un León más próspero y con más futuro».

El escritor Rogelio Blanco, autor del manifiesto que acompaña a la convocatoria, afirmó que la situación que atraviesa León es «muy grave» y reprochó que el reparto de los fondos de la Junta «sea siempre a los mismos destinos».

«Somos los únicos españoles a los que para serlo se nos pide que dejemos de ser leoneses. No merecemos un trato que más bien se convierte en maltrato. Persiste la ausencia de planes y proyectos, falta de inversiones significativas y crecimiento de la centralidad vallisoletana», dijo antes de señalar que la situación se ha visto agravada por una unión «forzada e impostada».

El dibujante Lolo, autor del cartel de la convocatoria, apuntó que «las autonomías se inventaron para descentralizar y tuvimos la mala suerte de que la nuestra está doblemente centralizada».

Cabe recordar que en el comienzo de 2020 resurgieron en la provincia diversas voces críticas con el modelo territorial y con la configuración de la autonomía de Castilla y León. Ese malestar, precedido de episodios como la crisis de Vestas, cristalizó en una gran protesta por las calles de la capital leonesa, convocada por los sindicatos y secundada por miles de leoneses, respaldados por los tractores de los agricultores, que entonces también mantenían su reivindicación.