Los gaviones son una caja o cesta de forma prismática rectangular, rellena de piedra o tierra que, en este caso, se rellenan de los cascotes de hormigón procedentes del desmantelamiento de las grandeschimeneas de la antigua central térmica. La que fuera todo un símbolo de La Robla desde los años 70 seguirá presente tras su derribo en el día a día de los roblanos con este guiño decorativo en la fachadacon el que se rinde homenaje.
El nuevo centro médico de La Robla se ubica en las inmediaciones de carretera nacional N-630, la principal vía de comunicación de la comarca, y será una realidad la próxima primavera gracias a una inversión de 1,3 millones de euros, de los que 500.000 se enmarcan en una subvención del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) y el resto con fondos propios del Ayuntamiento.
Las instalaciones
Las dependencias se articularán en torno a un patio, siendo un centro médico de planta baja en torno a un patio ajardinado. En cada uno de los cuatro lados del inmueble, se organizarán las distintas zonas funcionales. En el ala sur se instalarán las consultas ordinarias, con una zona independizada para las consultas de pediatría. El ala oeste albergará las estancias del Punto de Atención Continuada, incluyendo sala de estar y dormitorios de descanso para el personal sanitario. El ala este, por su parte, acogerá la zona destinada a recepción y administración. En esta misma zona se situará la sala de extracción y laboratorio, buscando cierta separación del resto de consultas para evitar aglomeraciones. Finalmente, el ala norte estará dedicada a los diferentes almacenes y cuarto técnico del edificio.
Eficiencia energética
El de La Robla será un centro médico referente en eficiencia energética con infraestructuras bioclimáticas y la instalación de un parque fotovoltaico en la cubierta del edificio capaz de satisfacer, casi en su totalidad, las necesidades de energía eléctrica.