El obispo auxiliar de Oviedo toma el relevo de Camilo Lorenzo al frente de la Diócesis de Astorga

La Santa Sede ha hecho pública este miércoles la aceptación de la renuncia al gobierno pastoral del obispo de la Diócesis de Astorga, en León, Camilo Lorenzo, por motivos de edad, por lo que el Papa ha nombrado nuevo obispo de esta Diócesis al obispo auxiliar de Oviedo desde 2013, Juan Antonio Menéndez Fernández. El nuevo obispo de Astorga ha ofrecido su “humilde” colaboración a las autoridades políticas y sociales para buscar juntos “un futuro justo y estable para todos”.

Juan Antonio Menéndez Fernández nació en Villamarín de Salcedo (Asturias), el 6 de enero de 1957. Realizó sus estudios eclesiásticos en los seminarios menor y mayor de Oviedo, afiliado a la Universidad Pontificia de Salamanca, donde obtuvo la Licenciatura en Estudios Eclesiásticos en 1980, es también Licenciado en Derecho Canónico por la misma Universidad, en el año 2005. Fue ordenado sacerdote el 10 de mayo de 1981.

Su ministerio sacerdotal lo desarrolló en la Diócesis de Oviedo, donde desempeñó los cargos de coadjutor de Santa María Magdalena en Cangas del Narcea (1981-1986), párroco de Teverga y parroquias adyacentes (1986-1991), arcipreste de Teverga (1988-1991), vicario episcopal de la Vicaría de Oriente (1991-2001), vicario general (2001-2011), canónigo de la catedral (2001-2013), parróco de Santo Antonio de Padua en Oviedo (2010-2011), vicario episcopal de Asuntos Jurídicos (2011-2013), párroco de San Nicolás de Bari en Avilés (2012-2013).

El 26 de abril de 2013 se hizo público su nombramiento como obispo auxiliar de Oviedo, asignándole la sede titular de Nasai y recibió la ordenación episcopal el 8 de junio de 2013. En la Conferencia Episcopal Española es miembro de las Comisiones Episcopales de Migraciones y Pastoral.

El nuevo obispo de Astorga ha expresado a través de una misiva la confianza en que el Señor le conceda “la gracia de ser un servidor bueno y fiel del Evangelio” al tiempo que agradeció al Papa Francisco “la confianza que deposita en mi persona al encomendarme pastorear esa iglesia particular de tan dilatada tradición”. También ha agradecido sus orígenes asturianos donde ahora deja su entorno familias, amigos y compañeros “para ir a vosotros con total libertad” y para entregarse “por entero a la predicación del evangelio y dar testimonio de la fe en Cristo resucitado”.

Menéndez ha reconocido que la realidad social “eminentemente rural y minera” de la Diócesis de Astorga no le resulta “extraña” después de haber nacido en una zona rural y haber ejercido en dos zonas mineras de Asturias. “estos dos sectores sociales están sufriendo desde hace tres décadas una fuerte transformación que deja tras de sí situaciones dolorosas en las personas, en las familias y en los pueblos”.