El parricida de Moraña llega este miércoles a la cárcel de Mansilla de las Mulas

El parricida de Moraña (Galicia) será trasladado a la prisión de León tras ser detenido y acusado del doble asesinato de sus hijas de 4 y 9 años el pasado fin de semana, a las que habría degollado con una radial. Según adelantaba en su edición de este miércoles el periódico gallego El Faro de Vigo, la jueza de Caldas ha tomado esta decisión "por seguridad". El recluso, internado en la cárcel de A Lama tras declarar en los juzgados de Caldas el pasado sábado, ha recibido amenazas de muerte en el penal pontevedrés, donde permanecía aislado en la enfermería, tal como recoge este diario gallego.

Fuentes de la cárcel leonesa confirman que el detenido, de origen asturiano, estaba siendo trasladado a León en la mañana de este miércolesFuentes de la cárcel leonesa confirman a La Nueva Crónica que el detenido, de origen asturiano, estaba siendo trasladado a León en la mañana de este miércoles, y que previsiblemente estará en Villahierro "en pocas horas".

El cambio de centro penitenciario se ultima con el mayor sigilo para evitar situaciones de potencial riesgo como las que se advertían en A Lama en los primeros días de presencia de David Oubel. 

David Oubel está acusado de asesinar a sus hijas de 4 y 9 años este sábado, cuando las menores pasaban las vacaciones con él, un hombre de 40 años, en lo que, supuestamente, es una venganza hacia su ex mujer, a la que habría advertido de lo que iba a hacer con las hijas de ambos.

La condena de David Oubel, que hasta la fecha se ha negado a declarar, podría ser una de las más largas dictadas hasta ahora La condena de David Oubel, que hasta la fecha se ha negado a declarar, podría ser una de las más largas dictadas hasta ahora, puesto que éste será el primer caso en el que, previsiblemente, se solicitará la pena de prisión permanente revisable, tras la entrada en vigor de la reforma del Código Penal.

El terrible caso de Moaña encajaría en el artículo 140 del nuevo Código Penal, que introduce una figura hasta ahora inédita en el ordenamiento jurídico español. En la reforma, que entró en vigor el pasado 1 de julio, se modifica el artículo 140 del texto legal para introducir esta figura que permitirá castigar al culpable de asesinato cuando "la víctima sea menor de 16 años de edad, o se trate de una persona especialmente vulnerable por razón de su edad, enfermedad o discapacidad".