Sin embargo, los precios varían con respecto a las dos empresas funerarias que hay en la capital. La premisa común en el estudio de la OCU era un entierro sin lujos ni extras, pero digno, similar a lo que suela gastarse en la ciudad e incluyendo el alquiler de un nicho durante un periodo mínimo de cinco años. Al mismo tiempo se solicitó presupuesto para una cremación.
En el caso de una inhumación, la factura media varía en 1.127 euros en función de la empresa elegida. El coste es de 4.269 euros en Serfunle –una sociedad mixta formada por los municipios de León, San Andrés del Rabanedo y Villaquilambre junto con la empresa Mémora– y los 3.142 euros de Los Jardines.
Los datos de la incineración
Mientras, en el caso de la cremación, la diferencia es de 200 euros, ya que la factura media es de 3.686 en Serfunle y de 3.486 en Los Jardines.
Si se establece la comparación con otras capitales de provincia de nuestra comunidad que figuran en el estudio elaborado por la OCU, es preciso destacar que el precio medio es de 4.586 euros en el caso de Valladolid y de 3.271 en las empresas funerarias de Salamanca.
Ya a nivel general, el informe es el resultado del trabajo desarrollado a través de la solicitud de presupuestos 113 compañías de 29 ciudades españolas. El precio medio es de 3.739 euros para una inhumación y de 3.617 euros para una cremación, pero puede variar mucho según el municipio. Por ejemplo, el coste medio de un entierro en Vigo (6.165 euros) y Alicante (5.455 euros) es más del doble que en Cádiz (2.551 euros) y en Zaragoza (2.539 euros).
El estudio también revela los conceptos con un mayor peso en la factura, como son el féretro, el cementerio y el tanatorio, entre más de una docena de conceptos diferentes: coche fúnebre, esquelas, flores, responso, etc. que también varían según la funeraria.
OCU critica la "falta de transparencia" de muchas funerarias, ya que una de cada tres no entrega un desglose detallado de los distintos conceptos, lo que dificulta notablemente las comparaciones entre presupuestos.