Iberdrola, Endesa, Hidrocantábrico y Viesgo han comunicado su intención de cerrar las centrales de Anllares, Velilla y Compostilla, en Castilla y León; Lada, en Asturias; y Andorra, en Aragón. «Mientras siguen con su plan de ir cerrando centros de trabajo, no se habla de los grandes beneficios que obtienen, beneficios que desde luego siguen sin invertir en las centrales que, desgraciadamente, cada día son más obsoletas», denuncian.
Desde el sindicato siguen incidiendo en la necesidad de alcanzar un pacto de estado sobre energía en el que participen todos los agentes directamente implicados, lo que incluiría a las administraciones públicas, a los partidos políticos, a los sectores económicos y a los sindicatos. En este pacto –prosiguen desde UGT Fica– se debe definir un mix energético de país para los próximos años en el que tengan presencia todas las fuentes de generación, incluida la térmica de carbón mediante carbón nacional. Su apuesta, aseguran, es que las centrales de carbón sigan funcionando hasta el año 2050, establecido como la fecha límite por parte de la Unión Europea para el cierre de este tipo de centrales. Mientras tanto, subrayan, seguirán defendiendo y exigiendo que en estas instalaciones se queme carbón autóctono.
A Madrid en autobús
En la protesta se prevé que participe gente llegada de Castilla y León, Asturias y Aragón, desde donde saldrán varios autobuses que entrarán en Madrid sobre las 11:30-11:45 horas. La concentración arrancará a las 12:00 horas y tendrá una hora de duración. Las empresas que ahora proponen el cierre de las térmicas –Iberdrola, Endesa, Hidrocantábrico y Viesgo– están, según el sindicato, contribuyendo a confundir a la opinión pública al equiparar descarbonización (entendida como minimización de emisiones de CO2) con la eliminación del uso del carbón. Siendo esto más grave todavía cuando, recuerdan, el carbón representa apenas el 9 por ciento de la energía primaria consumida en España, frente al 16,7% en la Unión Europea y el 30% en el mundo.