Empresarios y trabajadores del sector de los autobuses urbanos de la provincia de León mantuvieron este jueves una nueva reunión para la firma de un nuevo convenio colectivo que se saldó sin acuerdo y que derivará este viernes en el primero de numerosos días de paros parciales previstos.
La Federación de Empresarios Leoneses FELE aseguró en un comunicado que el convenio colectivo que regula este sector actualmente, vigente desde 2017, "se encuentra entre los más beneficiosos de la provincia, tanto en términos salariales como en condiciones laborales. Cuentan con una jornada anual de trabajo de tan solo 1.720 horas, una de las más bajas del país, y con unos salarios por encima de la media nacional que se ven periódicamente incrementados en función del tiempo de prestación de servicios en la empresa (por poner en contexto, un conductor con apenas dos años de antigüedad recibe más de 34.000 euros anuales). Además, destaca por contar con unas buenas condiciones sociales, especialmente en lo que respecta a la conciliación de la vida laboral y personal".
Así mismo, aseguran que desde que comenzaron las negociaciones del convenio en octubre de 2024, "la patronal ha presentado una propuesta que contempla un incremento salarial superior al 7% (un 3,85% para el año 2024 y un 3,3% para 2025). Esta propuesta mantiene además las condiciones sociales existentes, como los 31 días naturales de vacaciones, 5 días de permisos y la jornada anual de 1.720 horas. Además, las empresas han mostrado su compromiso con la garantía del poder adquisitivo de los trabajadores frente a los incrementos del IPC".
De igual modo, reconocen que "aunque la negociación sigue abierta, no se pueden asumir propuestas que pongan en peligro la viabilidad de las empresas del sector ni los empleos de los trabajadores".