La seguridad en el Camino de Santiago es una de las muchas tareas con las que cumple la Guardia Civil en toda la provincia, con un dispositivo genérico a lo largo de todo el año que se intensifica en las épocas de mayor afluencia de peregrinos, como el verano.
Pero además, ponen buena parte de su atención en el medio rural y en sus gentes, con la preocupación especial de la violencia de género. «Ahora mismo desde luego es lo que más nos preocupa», confirmó, por lo que «tenemos un plan de prevención en el entorno rural» para tratar de que «todas las mujeres puedan vivir con normalidad siempre y no sufran este tipo de ataques».
Esa es una de sus principales preocupaciones pero donde han tenido que ocupar buena parte de su tiempo en los últimos años es en la ciberdelincuencia. «Estadísticamente podemos hablar de que ahora mismo lo que más se está dando son los delitos cometidos en Internet», alertó. Una tarea en la que insisten sobre todo en las charlas o programas preventivos en los que participan en diversos centros educativos de la provincia. «La única forma de prevenir es informando a la gente sobre los buenos usos de internet», advirtió. Esta delincuencia a través de las nuevas tecnologías les ha obligado también a «un reciclaje continuo» ya que «nos encontramos en un mundo tan profundo y tan técnico que los delincuentes siempre van un poquito por delante». Además, «no son delitos que se cometan solo en el entorno nacional» y «muchas veces las plataformas desde las que se cometen están en otros países y con otra legislación».
175 aniversario
Durante todos los años de historia de la Benemérita ha cambiado mucho la propia sociedad y han surgido nuevas formas de delincuencia como la asociada a internet, por eso «el reciclaje tiene que ser continuo».
En el año de celebración del 175 aniversario, Julio Gutiérrez asegura que la Guardia Civil se encuentra hoy en día en «un buen momento institucional» y cumple «con toda profesionalidad» las misiones encomendadas. «A lo largo de los años han ido cambiando los sistemas políticos y nos hemos ido adaptando y ahora, en una democracia con todo el elenco de derechos y libertades, creo que nos hemos adaptado bien a los nuevos requerimientos que nos ha hecho la sociedad», expresó.
Con más de tres décadas de experiencia, ha vivido además algunos hitos de la historia de la Benemérita desde dentro, como la llegada de las primeras mujeres a un cuerpo que, hasta finales de los años 80 del año pasado, estaba reservado a hombres. Gutiérrez estaba destinado en Zaragoza cuando llegaron las dos primeras mujeres guardias civiles. «Se me disiparon todas las dudas cuando vi que una parecía que iba a ser muy buena guardia civil y la otra parecía que iba a ser normal, entonces pensé y comenté a mis compañeros: pues igual que los chicos», recordó, porque «lo importante es el guardia civil, independientemente de su sexo, sea un buen guardia civil, y las mujeres lo son». Eso sí, en la Comandancia de León siguen siendo minoría –apenas un 5%– aunque el acceso «está abierto tanto a unos como a otros».