El alcalde solicitó una dedicación exclusiva para él, al igual que tuvo su predecesor en el cargo, Sergio Álvarez, pero con un incremento del 30% en cuanto a los emolumentos.Álvarez percibía 1.650 euros brutos en 14 pagas, y el actual regidor proponía percibir 2.120, aunque la teniente de alcalde, Cristina Álvarez aseguró que no había tal subida "solo hemos repartido la remesa que había desde junio". Que el reparto fuera entre cuatro concejales y no entre siete es lo que ha engordado los pagos, justificó. Pero además el alcalde propuso contar con tres dedicaciones parciales para los tres ediles que le acompañan en un gobierno en minoría y ahí la subida era mayor. Mientras que los concejales que formaban parte del tripartito, Susana Vila por IU y Alfredo García por Alternativa por Cacabelos en el anterior mandato percibían por sus respectivas dedicaciones parciales 710 euros brutos, la intención era que pasaran a 1.415, prácticamente el doble. Y en cuanto a las percepciones por asistencia a plenos y comisiones, la subida propuesta por Alcaldía se elevaba a 100 euros, cuando en el anterior mandato era de 25.
Desde la bancada del PP, Adolfo Canedo incidió en que no podía apoyar este sistema retributivo, pese a defender esos cobros por el trabajo que se realiza, pero "esos cargos no han sido elegidos con los votos del PP y deben ser apoyados quienes le dieron la Alcaldía pese a que el PP ganó las elecciones". Presumió Canedo un pacto de izquierdas a lo que la portavoz de Socialistas por Cacabelos, Mari Carmen González, contestó con severidad, asegurando que su apoyo a la investidura del PSOE había pasado por derrocar al PP "el cáncer de este Ayuntamiento", palabras que Rodríguez recriminaría y por las que la edil solicitaría disculpas. Sí aclaró González que no pudieron alcanzar ningún acuerdo por la negativa del PSOE a sentarse a negociar con su grupo "pero nuestro voto siempre será coherente con lo que pensamos". Por eso, el voto de su grupo fue contrario a esas retribuciones, ya que la concejala considera que se resta dinero para cotear a los técnicos.
Sí recriminó la subida salarial de los ediles "parece que nuestros sueldos eran de risa, se puede decir que fuimos muy tontos", dijo. Desde IU, Susana Vila incidió también en la negativa a ese incremento y pidió que se pusiera sobre la mesa la deuda que aún tiene el Ayuntamiento de 3,9 millones. Aunque aplaudió que en el anterior mandato el trabajo del tripartito sirviera para reducirla, aún considera que hay que apretarse el cinturón. Sí aseguró que aprobaría esos sueldos si la deuda estuviera finiquitada, algo que considera que con las políticas que estaba desarrollando el tripartito en el anterior mandato, sería posible en los próximos cuatro años.
Consideró Vila que la subida de sueldos "es muy exagerada" y sacó a relucir un tema espinoso al pedir al alcalde que fuera agradecido con lo que el tripartito hizo por él en el anterior mandato mejorando sus condiciones laborales como empleado municipal e incluso defendiéndole frente a "llamadas que pedían su despido". Rodríguez pidió aclaraciones sobre esa realidad que consideró "muy grave" y lamentó que Vila asegurara que se le habían mejorado sus condiciones de trabajo por ser el número seis del PSOE en las anteriores elecciones.
La bronca se asentó de nuevo entre el PP e IU cuando Canedo pidió a Vila que no se centrara en él en sus críticas "hicieron oposición a la oposición, pero ahora olvídese de mí que ahora yo no soy su oposición". Por su parte, la portavoz de Socialistas por Cacabelos desveló su sorpresa por los silencios del PP en las críticas a los sueldos y auguró un gobierno "por decreto" tras la sesión, en la que los puntos de retribuciones y cargos e incluso de representación del municipio en órganos supramunicipales, no salieron adelante. En este sentido, tanto Socialistas por Cacabelos como IU reprocharon al regidor que, mientras se colocaba una dedicación exclusiva, se hacía con la representación en otros órganos. Principalmente afearon su intención de ser consejero en el Consejo Comarcal y le pidieron que respetara la exclusividad que solicitaba. González le solicitó que el resto de cargos los repartiera entre los ediles que menos responsabilidades tenían.
Tampoco se aceptaron las retribuciones a plenos y juntas de portavoces, que se multiplicaban por cuatro. Incluso Vila reprochó al PSOE que dijera que no se producía ese incremento "me parece una falta de respeto", dijo. El punto no se aprobó con la abstención del PSOE y el voto en contra del resto.
En cuanto a la creación de comisiones, el alcalde propuso la creación de una comisión informativa permanente especial de cuentas y asuntos generales. El PP considera que es una propuesta del equipo de gobierno "y como no le hemos votado para ser alcalde no le vamos a votar a favor", justificó el portavoz. Desde Socialistas por Cacabelos e IU se solicitaron explicaciones sobre si era posible que estas comisiones tuvieran miembros pares, algo que el secretario consideró regular. Pero ambos grupos consideraron que dos comisiones informativas no eran suficientes, por lo que el punto tampoco salió adelante.
El pleno dio cuenta de la creación de la Junta de Portavoces y de la periodicidad de los plenos,una cada mes, los últimos miércoles de mes a las 19:00 horas en primera convocatoria. La propuesta fue aprobada por unanimidad de todos los grupos, que consideraron ajustado hacer un pleno mensual.
Y de nuevo manos tendidas
Al final del pleno todos los ediles se centraron en volver a dialogar para conseguir "un gobierno fuerte y estable y eso no se consigue con seis ediles", decía Vila, rechazando la posible propuesta del PSOE de alcanzar un acuerdo a dos con IU, dejando de lado a Socialistas por Cacabelos. Por su parte González pedía que se dejaron de lado "las rencillas políticas y los personalismos" para llegar a un acuerdo tripartito de gobierno, que ya funcionó en el anterior mandato.
Y Adolfo Canedo sacó de nuevo a relucir la posibilidad de alcanzar un gobierno de concentración con todos los grupos con el fin de que facilitar un mandato cuya minoría ahora deja sobre la mesa las retribuciones a la espera de volver a llevarlas al próximo pleno, según aseguró el regidor.