Este es el último paso previo antes de la votación, en la que para que una candidatura gane deberá obtener más de la mitad de los votos en el recuento de la primera ronda. Si ninguna de las ciudad ha obtenido los apoyos suficientes en este sufragio, las dos opciones más respaldadas pasarán a la segunda ronda. Un escenario, más que probable, que podría posponer la decisión definitiva al día siguiente. Los estados miembros confirmarán su voto de la sede del centro de común acuerdo, con lo que no podrá haber abstenciones.
Con los informes finalizados, solo queda el trámite de la votación para conocer qué ciudad albergará la Agencia. Entre los criterios para decidir estarían la fecha en la que podría comenzar a ser operativo el centro, la accesibilidad del emplazamiento, las conexiones o la seguridad de la población.
De este modo, León remitió hace varias semanas un informe de más de 120 páginas en el que resalta las ventajas que tendría la ciudad para acoger el Centro Europeo de Ciberseguridad. Entre ellas, la presencia del Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe), de Inbiotec o de Scayle, pero también las comunicaciones con Madrid o un parque de viviendas de más de 4.100 inmuebles para comprar o alquilar. El informe sobre León que ha analizado la Unión Europea destaca la alta presencia de reservas de la biosfera, la fortaleza del sistema público de salud o el coste de la vida, entre 700 y 800 euros más barata que en Madrid o Barcelona.
La antigua estación de trenes albergaría la Agencia y el informe destaca su ubicación para favorecer las comunicaciones con otras ciudades y sus 2.000 metros cuadrados de superficie. La idea del Gobierno es invertir 36 millones de euros en los próximos cinco años.
Múnich y Bruselas, favoritas
León tendrá que compite por ser capital europea de ciberseguridad con Múnich (Alemania), Bruselas (Bélgica), Luxemburgo (Luxemburgo), Vilna (Lituania), Varsovia (Polonia) y Bucarest (Rumanía). Cinco capitales y la ciudad más importante de Baviera, que precisamente parte como una de las favoritas. Múnich cuenta con un ecosistema tecnológico más que notable, tanto en el ámbito universitario como con organismos como el Instituto de Investigación 'Code' de Ciberseguridad.
Con ventaja también parece partir Bruselas, debido a su posición privilegiada dentro del continente y también por su importante apuesta por la ciberseguridad. Sin embargo, el hecho de ser ya la capital administrativa de la Unión Europea puede jugar en su contra, ya que este tipo de agencias suelen repartirse por los diferentes países. De hecho, esta puede ser una baza de León dado que ayudaría a cohesionar el territorio, siendo la ciudad de menor tamaño de las aspirantes y la única del sur de Europa.
Junto a Bruselas y Múnich, otras cuatro capitales optan a albergar el Centro Europeo de Ciberseguridad. Igual que León cuenta con su experiencia con el Incibe, las otras candidatas también disponen de organismos que dan peso a sus argumentos para ostentar esta sede. De este modo, Vilna dispone del Centro de Equipos de Respuesta Rápida Cibernética en el que varios países de la Unión Europea realizan actuaciones coordinadas contra los ciberataques.
Por su parte, Varsovia también ha hecho despegar su sector TIC en los últimos años y cuenta con el homólogo polaco del Incibe. Mientras tanto, en Luxemburgo ya se cuenta con la Empresa Común Europea de Informática de Alto Rendimiento (EuroHPC), un aspecto que se debe juzgar si juega a favor o en contra durante la fase de deliberación que se inicia este miércoles. Al mismo tiempo, Bucarest también aspira a ser la capital europea de la ciberseguridad y en el año 2014 inauguró una oficina del Consejo de Europa para luchar contra el cibercrimen.
Europa debatirá durante los próximos siete días cuál será su capital de la ciberseguridad. Un título que podría consolidar el proyecto, económico y laboral, de futuro para la ciudad de León.