Nacho Alonso, miembro de la Agrupación Vecinal Gordonesa (AVG) y teniente de alcalde, hace balance de su incursión en la política municipal, las situaciones que han encontrado, los grandes proyectos y los retos que quedan.
– Hace algo más de un año, se iniciaba en el mundo de la política sin ninguna experiencia previa y lo hacía como teniente de alcalde tras un pacto con el PSOE. ¿Qué balance hace?
– Puuf, buena pregunta. No hay día que no haga balance. Por una parte, no estoy contento. Nuestro gran proyecto tendría que ser el bienestar de las personas que viven en nuestro Ayuntamiento y que pagan unos impuestos para ello . Si no los cuidamos se irán y nos preguntaremos el motivo de su partida. El gran proyecto que les debemos a nuestros ciudadanos es sus calles sin parches, sus instalaciones con un perfecto mantenimiento y sus necesidades médicas y sociales atendidas. El lado de mi contento viene por el contacto con la gente, mi deseo de que participen en decisiones que les incumbe , el poner en valor a los presidentes y presidentas de las Junta Vecinales que son los/as grandes olvidados/as, el admirar y dar voz a personas y asociaciones que dinamizan nuestra comarca. Mi lado de contento viene cuando consigo una mayor transparencia en el día a día de las decisiones del Ayuntamiento...
– ¿Se debe a que no ha sido capaz o se ha encontrado zancadillas?
– Los grandes partidos se deben a sus partidos. No se trata de zancadillas se trata de entender lo que es una coalición y eso no todo el mundo lo entiende. Coalición entre otras cosas, significa que no has conseguido una mayoría suficiente y que, por lo tanto, lo que hacías antes no es aprobado por todo el mundo y algo tiene que cambiar. El poder no significa hacer lo que uno quiere con el falso pensamiento de que lo que hace es lo mejor para el pueblo. Cuando uno piensa eso, es que en el fondo piensa que lo suyo es lo mejor para el pueblo.
– En este ‘impás’ que hace para reflexionar, ¿se arrepiente del apoyo dado?
– Sabía que no iba a ser fácil. Se pactó con el PSOE porque queríamos respetar una mayoría que había salido de las urnas. Sabíamos que si queríamos cambiar algo tendría que ser desde dentro . ¿Me arrepiento? A la política se viene llorado. Haga lo que haga, el arrepentimiento ya no debe ser una opción. Yo siempre he pensado que trabajar en equipo desgasta más, pero el resultado es el pensamiento de muchas personas.
– Cuando se presentan a las elecciones, su lema era que no eran políticos, eran nuestros vecinos, y hablaban de acercar la administración. ¿Lo ha conseguido?
– Yo sigo siendo vecino y no político. A mí solo me interesan las gentes de los pueblos, sus necesidades y la urgencia en ayudarles. Me interesa escuchar y ayudar en lo que puedo a las Juntas Vecinales, sobre todo a las pequeñas , porque todas sin excepción son las grandes abandonadas. Los grandes partidos solo se acuerdan de ellas cuando llegan las elecciones y eso no lo digo yo, lo dicen ellos y ellas. No mido mi labor por porcentaje de votos de cara al futuro. Creo que a los pueblos grandes se les ayuda mucho más que a los pequeños y eso es una injusticia, porque la señora de Llombera paga los mismos impuestos que la señora que vive cerca del Ayuntamiento.
– Hay una gran deuda municipal, pero ni en esta ni en anteriores legislaturas se ha explicado a los vecinos...
– Porque no interesa. ¿ A quién le interesa aceptar y pedir disculpas por el fracaso de una gestión y después presentarse a unas elecciones? En todo esto hay algo objetivo. Hemos estado unos años con un plan de ajuste y hace unos días se comenzó la tramitación del siguiente plan de ajuste. Cuando digo esto en los foros internos del Ayuntamiento se me tacha de populista. Si tuviéramos una deuda pero nuestra población estuviera bien atendida y contenta, sería incluso aceptada pero la realidad no es esa. La democracia debe ser la opción pero la democracia se tiene que proteger de representantes que hacen cosas que en sus propios hogares y en su economía no harían. Dicho de otra forma y a nivel nacional, falta una ley que diga que todos aquellos gobernantes con capacidad de poder que realicen una mala gestión tendrían que pagar las consecuencias tener repercusión en su vida personal y económica. Veríamos como muchas cosas que se hacen no se harían.
– Hablemos de grandes proyectos. Uno de ellos es la Zona Alfa, que tanto Jesús Calleja como el consejero Suárez-Quiñones han venido a presentar, y que algunos definen como ‘la salvación’ de la Montaña Central. ¿Es suficiente motor?
– Creo que nadie cree que la Zona Alfa sea la salvación de esta zona, porque si no tendría un problema muy gordo. ¿Zona Alfa me parece bien? Sí. ¿Contribuye a la dinamización? Sí. ¿Tiene fallos? Sí. ¿Se pueden arreglar? Si hay interés por las partes, sí. Crear proyectos que generen incertidumbre en la gente que lleva aquí toda la vida no es bueno.
– ¿Se está refiriendo a la ganadería?
– Por ejemplo. Pero también me refiero a las juntas vecinales, a los clubes de caza. Un amplio porcentaje de las juntas vecinales sólo reciben ingresos por los puertos y por los club de cazadores. ¿Si los cazadores abandonan y los ganaderos los dejan quién va a sostener a estas entidades? ¿Será la estructura de la zona Alfa quién les pague? ¿Quién pondrá dinero para mantener esta estructura? ¿El Ayuntamiento? ¿Las juntas vecinales? ¿De dónde lo van a sacar?. Demasiadas preguntas sin contestar hoy en día.
–Habla de compensaciones, y me vienen a la mente la Variante de Pajares. ¿Se está haciendo algo?
– Que yo sepa no. Pero podríamos hablar de algo más cercano, de la Administración Concursal. A mí me gustaría saber qué se ha hecho, cómo ha actuado… Es inexplicable que el Ayuntamiento no se personara como entidad perjudicada hasta hace tan solo unos meses en vez de estar desde 2017 y para ser justo, el hecho de que desde hace unos meses el Ayuntamiento sea parte perjudicada se la debemos al actual alcalde.
– Participa en entidades como Cuatro Valles, donde La Pola anunciaba su deseo de, quizá, salir...
– Si me dices ‘enumera cuatro cagadas en este tiempo’, yo creo que una, sabiendo lo que sé ahora, es haber apoyado que el alcalde pueda decidir salirse de Cuatro Valles. De todas formas, el acuerdo es que el alcalde tomará una decisión, pero contando con los demás partidos.
– Es, además, patrono y tesorero en la Fundación de la Reserva de la Biosfera del Alto Bernesga. ¿En qué punto se encuentra esta Fundación?
– Lo primero, mi respeto a los trabajadores y trabajadoras de la Fundación. Reconozco su trabajo y dedicación. Dicho esto, la Fundación debe ser independiente, participativa en la selección de sus actividades, transparente en su economía y no estar sujetos ni a colores políticos ni a estrategias unipersonales porque al final en el entorno pierde su credibilidad. Para saber si una Fundación funciona, se ha de preguntar a su entorno social por mencionada Fundación y sus servicios y si los efectos de sus actuaciones han contribuido a su vida. Si la respuesta es positiva todo genial, pero si emergen dudas, la Fundación se lo tiene que hacer mirar y yo soy consciente de que una parte importante de la población y de los presidentes y presidentas de juntas vecinales tienen dudas de esto. Una fundación en su ámbito de acción debe de sumar y multiplicar. En estos momentos la Reserva se encuentra inmersa en cambios importantes, ya que el Ayuntamiento de Villamanín formará parte del patronato. A mi entender este patronato quedará cojo si no se sientan en el con voz y voto representantes de las Juntas Vecinales. El noventa por ciento del territorio es propiedad de ellos , y también los empresarios que, a mi entender, son activos de desarrollo.