La primera visita oficial de Alberto Núñez Feijóo a León como presidente del Partido Popular no pasó desapercibida. El líder de la oposición dio un paso más en su pulso político con Pedro Sánchez a cuenta de la educación y lo hizo desde la capital leonesa, concretamente desde el sótano del Museo Botines. Feijóo fue este miércoles el protagonista de un acto privado del partido en el que el PP presumió del "éxito" educativo de Castilla y León, amparado en el último informe Pisa, y anunció que la prueba de acceso a la universidad, la Ebau, será común para todas las comunidades en las que gobierna el PP desde 2025.
«Nuestro compromiso es que la Ebau sea un sistema común en las 11 comunidades del Partido Popular y ya estamos trabajando para buscar los puntos de encuentro y presentar un proyecto común para toda España que pondremos a disposición del Ministerio de Educación», anunció Feijóo, que llegaba a León después de reunirse el día anterior con todos los consejeros de Educación del Partido Popular y acordar la medida que anunció en Botines.
«Defiendo la igualdad de oportunidades y que al mismo esfuerzo y en el mismo país, mismas oportunidades, porque alguien que sea de León puede ir a Galicia, Valencia o Cataluña a estudiar», argumentó el líder conservador. «No tiene sentido que haya 17 exámenes diferentes para acceder a un mismo sistema, que es el sistema universitario español», razonó. «Este sistema común marcará un antes y un después. Tenemos una gran responsabilidad, porque siete de cada diez alumnos estudian en nuestras comunidades», añadió el líder ‘popular’.
«Aulas sin ideología»
El discurso del líder nacional de los populares estuvo marcado por la crítica a las políticas educativas del Gobierno de España y acusó al Ejecutivo de ejercer «ingeniería social para llevar a los jóvenes hacia el lugar que pretende el Gobierno» mediante «ideología». «Se puede hacer política en muchos sitios, pero en las aulas de nuestros hijos no», aseguró Feijóo, porque «las aulas tienen que estar vacías de ideología y llenas de conocimiento y lo contrario es un atentado contra la libertad y la formación de nuestra gente».
El presidente del PP relacionó los «prejuicios» que ve en las aulas con la «falta de política en las instituciones», y se amparó en que las decisiones del Congreso «las toman otros desde fuera de España», en referencia a la cuestión catalana y el líder independentista fugado, Carles Puigdemont.
Pisando la actualidad, el presidente ‘popular’ calificó el plan de refuerzo educativo anunciado por Pedro Sánchez como una «copia mala de lo que aplica el PP allí donde gobierna» y comparó el «exitoso» modelo formativo de Castilla y León con los de países como Canadá o Dinamarca, «lugares con mayor renta por cápita». Alberto Núñez Feijóo se amparó en el último Informe Pisa, que colocó a la comunidad como la mejor de España en Ciencia, Comprensión Lectora y Matemáticas. «Cuando los que saben de educación deciden las políticas educativas, el sistema va bien», aseguró el líder ‘popular’, al tiempo que mostró su compromiso de llevar la «alternativa que representa el presidente Mañueco» al resto de España.
El discurso de Feijóo continuó por dos frentes que ya son conocidos como bazas que defiende el PP en materia educativa. El primero de ellos, la defensa de la meritocracia: «La gente debe tener las mismas oportunidades y después lo que hay que hacer es esforzarse y trabajar», razonó Feijóo, y criticó diferentes aspectos de la actual ley educativa, conocida como Ley Celáa, que llevan a los alumnos a «pensar que el mérito y el estudio son temas menores o irrelevantes y que da igual aprobar que suspender» y «eso es lo mismo que decirle a un alumno que da igual sumar que restar, y es justamente, no sólo igual, sino lo contrario».
Por otro lado, el presidente del PP defendió de forma férrea la educación especial. «¿Qué es esto de decirle a un padre o madre que su hijo no puede ir a la educación en la que se busca un modelo de inclusión social y laboral?», se preguntó al tiempo que felicitó al presidente de la Junta por mantener «centenares» de plazas en los centros educativos que son exclusivos para alumnos condiscapacidad. «Al PSOE le molesta que las familias tengan libertad para elegir la educación especial», añadió.
Feijóo, alumno de Maristas
Hora y media en total de un acto en el que no faltaron las anécdotas. Feijóo nombró mal una vez a la comunidad al decir «Castilla–León» y rememoró sus cinco años como estudiante interno en el colegio Maristas Champagnat, desde los 9 hasta los 14 años. «Vine desde una aldea de Galicia a León y aquí me enseñaron a estudiar todos los días, de lunes a domingo, porque un político tiene que estudiar todos los días que siempre aprende algo», comentó.
Feijóo estuvo rodeado en este acto por alcaldes y militantes del partido, además de la vicesecretaria de Educación del PP y presidenta provincial, Ester Muñoz, y el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, además de otros cargos políticos. Un acto de partido que no estuvo abierto al público pero que sirvió para sacar pecho del modelo educativo de la comunidad e incluyó una conversación con profesores, alumnos y asociaciones que el PP había escogido previamente.
Por su parte, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, defendió los ingredientes que han llevado al éxito educativo en Castilla y León, bajo la atenta mirada de la consejera del ramo, Rocío Lucas. Así, destacó el plan de refuerzo educativo con desdobles en las aulas «para los alumnos que necesitan apoyo» y anunció que «todas los aulas de Castilla y León estarán conectadas a la alta tecnología antes de 2026».
Mañueco incidió también en la formación constante del profesorado, y aseguró que la Junta «invierte el doble que la media de España» tanto en dinero como en horas de formación «para que los profesores aprovechen los nuevos métodos tecnológicos que permitan darle la mejor formación a los alumnos». Además, recordó que la Junta ha incrementado un 50 por ciento el número de orientadores en los centros escolares.