Fernández Ladreda sigue ‘reinando’ en el callejero de León

Fue ministro de Obras Públicas durante el franquismo (1945-1951), lo que le convirtió en un clásico en los callejeros de las principales ciudades españolas, entre ellas León, que mantiene su nombre en una de las avenidas más transitadas de la capital. Lo cierto es que más allá de reconocimientos en muchos lugares se bautizaba una determinada vía con el nombre del gestor de los dineros públicos destinados a las inversiones en infraestructuras como un gesto para tratar de conseguir alguna obra en un momento muy complicado para las arcas municipales de buena parte de los Ayuntamientos de España. Así ha sido publicado en medios como el Faro de Vigo en base a las declaraciones de las Asociaciones de la Memoria asturianas: «El halago al ministro de turno era el mecanismo habitual para conseguir las inversiones más imprescindibles en un país sumido en la miseria de la postguerra». Más allá de la anécdota, el nombre de José María Fernández Ladreda se cuestiona por la relación con el aparato de represión del franquismo, como ha sido publicado en numerosas ocasiones.

Con estos antecedentes, en base a la Ley de Memoria Histórica, localidades como Madrid. Candás (Asturias), Arrecife (Lanzarote) o, desde ayer, Segovia han optado por retirar las placas con el nombre del ‘Rey del Callejero’ de las calles en las que se encontraban.

No ha sido así hasta el momento en la capital leonesa donde este vestigio del franquismo sigue denominando la avenida que une la Plaza de Toros con la ronda este. A diferencia de otras ciudades como Pontevedra, el debate sobre la eliminación de Fernández Ladreda del callejero leonés no ha llegado al Consistorio de Ordoño II. Segovia, ciudad de adopción del que también fuera alcalde de Oviedo, sí ha dado el paso y puede servir de ejemplo para otras ciudades dispuesta a cumplir con la Ley de Memoria Histórica.

En Segovia sí se le aplica la Memoria Histórica

La aplicación de la Ley de la Memoria Histórica por parte del Ayuntamiento de Segovia, relacionada con la denominación de varias calles y plazas de la capital empieza a verse reflejada en las placas que nombran las calles afectadas. Una de las más representativas es la de la anteriormente conocida como Avenida de Fernández Ladreda que ha pasado a denominarse Avenida del Acueducto, nombre elegido por votación popular.