«De casta le viene», repiten en Puebla de Lillo al ver en la publicidad de Masterchef Junior la foto de un niño al que conocen muy bien, Fernando, de 12 años y que concursa por Madrid. «Es que sus padres viven allí, en el Barrio del Pilar, pero son unos asiduos del pueblo, en vacaciones, de verano y de invierno, que al chaval le gusta esquiar y no pierde la oportunidad de ir a San Isidro».
Lo confirma su madre, Maribel, quien señala que dos de las grandes aficiones del chaval nacen en Lillo, la citada del esquí y «la de montar a caballo, que desde niño le enseñó un primo mío y le apasiona», explica la emocionada madre que pide no tener que contar «gran cosa, ya que nos piden absoluta confidencialidad, pues aunque los programas ya están grabados no comienzan a emitirse hasta el jueves, 26. Esta semana emiten los tres primeros, casi un maratón».
Con el «de casta le viene» se refieren en Puebla de Lillo a la tercera gran afición de Fernando, o tal vez la primera: la cocina. Y es que dos hermanos de su abuelo son los grandes referentes de la gastronomía de la montaña de Lillo: los restaurantes Madrid y Ruta del Porma, por cuyas cocinas y comedores aún resuenan los nombres de Luis y Matilde; de Quico y Sara... y de Fernando pues «le encantaba meterse en las cocinas, horas entre los fogones, con los lavaplatos, en lo que fuera... y mira dónde fue a parar».
Su familia regenta los restaurantes Madrid y Ruta del Porma, donde Fernando pasaba horas en la cocina
Lo debía tener muy claro Fernando —«un chaval supermaduro para su edad»— pues fue él mismo quien realizó todos los trámites para acudir al concurso. «Vio en la tele el anuncio de los cásting y rellenó los mil formularios que le pedían para poder optar a participar, tan solo le ayudamos en la grabación del vídeo que, obviamente, no podía hacer solo». Lo hizo por el mes de mayo y les ocurrió una curiosa anécdota. «Era a primeros de julio y entró en el correo para ver si ya estaban las notas del curso —es muy buen estudiante, le encantan las Ciencias— y lo que encontró fue el correo de la productora de Masterchef, aunque le quedaba un largo camino, solo había sido seleccionado, tenía que pasar muchas pruebas para estar en el programa».
Y las pasó, una a una. Fue uno de los 16 elegidos entre 10.000 candidatos y en la web de Masterchef Junior aparece el niño madrileño de Lillo, que por la rama capitalina suma otras aficiones, como el pádel o la natación.
Al margen de media España, ya que se trata de uno de los programas más seguidos de la televisión y la estrella de La 1, en Puebla de Lillo y toda la comarca estarán pendientes de ese niño que nada les puede avanzar de las seis intensas semanas de grabación que ha vivido, con viajes, visitas de famosos... y ya le gustaría a él hacerlo pues «es muy hablador y abierto», pero ya falta poco para que todos lo podamos ver.
- ¿De mayor querrá ser cocinero, entre sus recuerdos familiares de Puebla de Lillo y ahora la tele?
- Y mi hermana, que también es cocinera. Le gusta mucho la cocina, pero solo tiene 12 años, ya ha querido ser Policía Municipal, después profesor, como su madre... y además es muy buen estudiante. Cualquiera sabe qué camino seguirá.