Próximos ya a despedir el año 2023, el alcalde de León, José Antonio Diez, repasó este miércoles en Cope León diferentes asuntos de interés municipal. En el programa Entre Nosotras, que se emite en colaboración con La Nueva Crónica, Diez habló del avance de obras ya en marcha en la capital, como es el caso de las de la ronda interior, en las que reconoció que han encontrado algún inconveniente. «Seguimos pendientes de rematar las expropiaciones porque estamos teniendo bastantes problemas con un par de propietarios e inquilinos», dijo. Señaló también que esto les ha hecho perder ya «una parte de la subvención europea», pero que en todo caso, «en breve, a lo largo del año, se rematarán esas obras». El alcalde se refirió también a otra actuación en el barrio de La Palomera, la construcción del Parque de las Tierras Leonesas, que remarcó que estará listo «en poquito tiempo», en un plazo que confió en que no supere los «dos meses» dejando a un lado, por supuesto, lo que tarden en desarrollarse las especies que se plantarán en sus parcelas. «Va a ser un nuevo espacio verde para el disfrute de los ciudadanos excepcional y creo que va a quedar muy bien», subrayó.
Además de estas dos, son varias las obras que el Ayuntamiento tiene actualmente en marcha y que se están apurando lo máximo posible porque «es verdad que Europa determina y fija unos plazos que hay que cumplir, porque si no pierdes esa subvención». Se piden prórrogas, afirmó, porque existe también otra limitación, que es la de encontrar empresas que ejecuten esas obras. Recordó, además, que «León es una de las ciudades que más fondos europeos ha sido capaz de captar», algo que valoró como una «virtud» y que consideró que «habla muy bien de esta administración y especialmente de sus técnicos, que son los que elaboran las propuestas». Así, pidió «disculpas a los ciudadanos» por las molestias que puedan suponer estos trabajos ejecutados al mismo tiempo y confió en que «de aquí a poquitos meses los que están ‘vivos’ puedan estar acabados», aunque avanzó que «seguro que luego vendrán otros».
Aparcar, «tarea complicada»
Diez reconoció también que aparcar en el centro es y ha sido siempre «una tarea complicada» y que el parking de Santa Nonia se muestra por ello como «un equipamiento básico y esencial para nuestra ciudad independientemente de las políticas de movilidad que se están implementando» y que recordó que vienen, además, «dirigidas en gran parte desde la propia Unión Europea» y de las que él se declaró «partidario». El desarrollo de este parking, dijo, «es básico y esencial para una mejor movilidad en la ciudad». Lo que ocurre, tal y como explicó, es que el propietario de eses suelo es la Diputación de León, con la que quieren «llegar a un acuerdo o convenio en la cesión de la parcela o de otro tipo para poder desarrollarlo». ¿Cuándo? «Yo creo que en este mandato vamos a ser capaces de hacerlo», apuntó. Respecto a las actuaciones para el calmado del tráfico y peatonalizaciones, el alcalde subrayó que un calmado de tráfico puede suponer «desde eliminar algún carril de circulación, que es lo que hemos hecho ya en algunas zonas de la ciudad y en algunos barrios, a la restricción absoluta del tráfico» exceptuando a los residentes y a los servicios esenciales. «Yo creo que en las ciudades, y esto creo que lo va compartiendo ya todo el mundo, la peatonalización sin duda es riqueza desde el punto de vista de su desarrollo cultural, comercial, turístico y desde otro que cobra también mucho interés, como es el de la salud. Menos vehículos supone menos contaminación, menos ruido, más tranquilidad, más calidad de vida y, por lo tanto, ese es el modelo por el que tienen que abogar las ciudades», zanjó.
Puente y polémica, «sinónimos»
Respecto a las recientes declaraciones del ministro de Transportes, Óscar Puente, respecto a la autovía A-60, Diez insistió –como ya había señalado este martes– en que no dudará en pedir su cese como ministro «de seguir en esa deriva de ataque tan frontal a las infraestructuras de León y de su provincia que son tan necesarias para nuestro desarrollo y que llevan un retraso eterno, por decirlo de manera educada». Aseguró también que «hablar de polémicas y de Óscar Puente casi son sinónimos» y le recordó que un ministro «tiene que trabajar en beneficio de todos los españoles, en la vertebración del territorio y tiene que cumplir también con esos objetivos que también se marca el Gobierno de desarrollo y de lucha contra la despoblación y que, precisamente, todo lo que predica, pregona, dice y habla, es contrario a esas políticas». Reconoció, sin embargo, que no le preocupa que su gestión acabe perjudicando el desarrollo de León y su provincia porque «las decisiones se toman en otros ámbitos también y hay otros compromisos que yo creo que están afortunadamente por encima de lo que pueda decidir el ministro y que tienen que ser ya realidades». «Nadie va a paralizar» proyectos ya en marcha, advirtió, aunque dijo sí que podría llegar a influir sobre otros de nuevo desarrollo, el diseño de nuevas infraestructuras o el apoyo a algunas cuestiones como los aeropuertos, etc. por su actitud « tan sumamente centralista y enemiga de León. Pero tiempo al tiempo», concluyó.