Hostelería de León lamenta la pérdida de más de 5.000 empleos durante la pandemia

Un año de pandemia, 1.500 locales cerrados y más de 5.000 empleos perdidos. Es el diagnóstico que hace Hostelería de León de la evolución del sector en la provincia desde que se desató la crisis sanitaria y económica provocada por el coronavirus.

Los hosteleros han llevado de nuevo este martes sus protestas a las puertas de la Delegación de la Junta, donde han derribado un simbólico muro de cajas de cartón en el que estaban representadas sus reivindicaciones. “Hemos querido simbolizar con este muro cómo nos sentimos con las administraciones. Nos estamos dando de cara contra un muro que ni nos escucha, ni nos tiene en cuenta, ni nos hace participar en la toma de decisiones. Desde ayudas directas, ampliación de carencia de los créditos, planes de empleo para el sector, un estímulo para la motivación del consumo… Pedimos que el Gobierno haga lo que tiene que hacer y gobierne a los hosteleros también y nos dé una solución para poder salir adelante de esta situación”, ha indicado el presidente de Hostelería de León, Martín Méndez.

Además, ha valorado como positiva la apertura del interior de los bares con un tercio de su aforo, aunque ha considerado que es insuficiente para poder hacer frente a los gastos fijos como el personal, la renta o la hipoteca y la luz. Ha lamentado además que el Gobierno y la Junta publiciten sus ayudas sin que terminen de llegar a las empresas, por lo que reclama mayor celeridad en su tramitación e ingreso.

“Todavía no están llegando a las empresas. Entonces, sí que les pediríamos celeridad en ese caso, porque la situación de las empresas es agónica. Estamos ahogados y necesitamos que le den prioridad a esas ayudas para que las empresas puedan sobrevivir”, ha detallado Méndez.

Los hosteleros insisten finalmente en que los contagios se producen más en las reuniones privadas que en sus locales y defienden que tienen medidas de seguridad, como la distancia social, la desinfección y el uso de la mascarilla, que no se respetan en el ocio que se está desarrollando en los domicilios.