La Facultad de Económicas y Empresariales de la Universidad de León ha sido el escenario de una nueva edición de la feria de emprendimiento León Business Talent, que busca “servir de puente entre las ideas de los estudiantes y el mundo empresarial”, tal y como ha explicado la rectora, Nuria González. En ella se han presentado un total de 15 propuestas diferentes e innovadoras en las que han estado trabajando los estudiantes de Biotecnología y los de Relaciones Laborales y Recursos Humanos.
Imanol Fernández, estudiante de Biotecnología, ha explicado el proyecto del equipo del que forma parte, que ha elaborado un parche gingival de uso nocturno con dos objetivos: aliviar la sequedad bucal y combatir el mal aliento. Esta "especie de gelatina" se colocaría en la encía y se iría "degradando" a lo largo de la noche por la acción de la saliva. Alejandro López, alumno de Relaciones Laborales y Recursos Humanos, ha trabajado en otra propuesta a la que han llamado ‘Del campo a casa’ y que pretende acercar al agricultor al consumidor final, reduciendo intermediarios. Esta consiste en una página web que une al productor con el comprador, evitando que se "inflen los precios" en procesos intermedios y consiguiento que "los agricultores ganen más dinero y los clientes consuman productos más frescos y sanos".
Por su parte, María Villar y Sara Blanco proponen ofrecer una ayuda o apoyo a personas dependientes, ancianos o niños con necesidades especiales a través de un asistente virtual. "Es una inteligencia artificial que tiene integrado un dispositivo y un sistema de seguridad mediante micrófonos, cámaras o sensores, por si la persona se cae, y que avisa a los servicios de emergencia. También dispone de un smartwatch que mide las constantes y que si hay alguna anomalía también llama a emergencias y que tiene también un GPS para que las personas que se pierdan puedan llegar a su casa, entre otros servicios", explican.
No han sido los únicos, también se han expuesto otras iniciativas como una cafetería en la que decorar tazas y cuencos de cerámica mientras se disfruta de la consumición; la creación de un cepillo de dientes capaz de detectar infecciones; de una marca de ropa con estilos adaptados a personas con discapacidad o necesidades específicas o la conversión en viviendas de contenedores marítimos que no están en uso. Desde la ULE explican que las aulas son también “semilleros de ideas que pueden transformarse en proyectos innovadores” y esta feria es una clara muestra de ello.