60 de los 111 jóvenes que están alojados en la residencia Doña Sancha de León han padecido en los últimos días una posible intoxicación alimentaria según ha informado la Junta de Castilla y León, responsable de la instalación. Según señala el servicio territorial de Sanidad se encuentra ya investigando el origen del posible brote que ha afectado a más de la mitad de los residentes, que han descrito episodios de diarrea y vómitos, síntomas leves que no han requerido hospitalización en ningún caso.
Así mismo, la Junta ha señalado que ninguno de los trabajadores de la residencia ha presentado síntomas, por lo que se han desplazado a la residencia inspectores de la sección de salud pública con el objetivo de tomar muestras de los alimentos y completar la investigación de lo sucedido.