La Policía Local, que este martes celebra la festividad de su patrón, San Marcelo, tiene entre sus filas a un hombre que ha llevado con orgullo la bandera de León hasta el corazón de los Estados Unidos. Y lo ha hecho al tiempo que conocía el día a día de los agentes de un estado tensionado, en plena campaña electoral y con altísimas tasas de criminalidad.
Félix Casado, de 52 años, ha descubierto lo que es patrullar en los distritos 6 y 7 de Washington DC, los máspeligrosos de la capital, con más de 300 muertes cada año por heridas de bala. «He vivido unos cuantos tiroteos y lo que más me ha sorprendido es la naturalidad con la que se enfrentan a ellos los agentes, allí ir a uno es como ir aquí a un bar por una denuncia de ruido», señala un hombre que, según la media de tiroteos que se producen allí, ha tenido que afrontar el disparo de un arma civil «cada dos horas y media».
Félix estará este martes firme en el Palacio de Exposiciones para vivir el acto de homenaje a la Policía Local de León y lo hará con toda su veteranía y experiencia internacional, recién llegado de una estancia que lo ha llevado por todo el estado de Maryland entre el 4 y el 22 de octubre, alojándose en viviendas de compañeros de la Policía Metropolitana, estatal, «conocidos como Troopers», con quienes incluso se subió a un helicóptero de rescate, donde realizó entrenamientos nocturnos.
También ha probado todo tipo de artefactos de alta tecnología, como «una aplicación móvil con micrófono que permite detectar por el sonido del disparo el lugar de un tiroteo o incluso el arma utilizada, en apenas unos segundos y con un margen de error de cuatro metros».
'Star': Asociación de intercambio policial
Todo ello lo ha aprendido por iniciativa propia, con un viaje profesional que ha gestionado en sus vacaciones y costeándose él los gastos, ya que no es una formación específica del programa de la Policía Local de León, sino que esta experiencia vital y personal del agente Casado responde a un programa de intercambio a través de la asociación policial ‘Star’, a la cual pertenece.
Ya el año pasado, en octubre, vivió su primera experiencia de este calibre, y lo hizo en Wisconsin y Alabama, donde vio el racismo «latente», a ciudadanos con armas «colgadas al hombro» y un fentanilo que estaba «dinamitando» a la población. Esta vez, ha pasado a la gran capital y, tras aquel impacto cultural y policial que vivivó hace un año, ahora ha tenido que manejarlo aún mejor para enfrentarse a los barrios marginales de la capital, donde llevar armas está prohibido, «pero casi todo el mundo que vive allí tiene una, lo que pasa que la esconde bajo la ropa».
Dentro de esta experiencia, ha llegado incluso a conocer la Casa Blanca, pero no cualquier parte, sino «un ala que no se enseña al público habitual que accede en las jornadas puertas abiertas y que a nosotros nos explicó en detalle el servicio secreto». ¿Cómo son estas salas? «Nada especial, salas muy grandes», bromea, «pero estaba allí dentro», apunta con la emoción que tiene alguien impresionado y orgulloso de lo vivido.
¿Habrá más leoneses como el agente Casado en el futuro? Parece que sí, porque Félix, que suma ya tres estancias internacionales al haber tenido también otra más en Alemania, el próximo año dejará su sitio a dos compañeros de León que están interesados, porque «esta experiencia es única y te permite aplicar todo lo que aprendes, todos esos recursos y toda esa profesionalidad en tu trabajo del día a día».
También puede celebrar la Policía Local leonesa que gracias a la asociación 'Star', en el mes de julio estuvieron integrados en la Municipal dos personas de Alemania y Estados Unidos.